Triste noticia
Falleció Milagros, la niña que había recibido un trasplante de médula
Milagros tenía 13 años y su luz se apagó el pasado viernes. En julio del año pasado había recibido un trasplante de médula, donada por su padre y si bien fue exitoso, la enfermedad regresó con más agresividad.
En abril del año pasado, la provincia de Entre Ríos conocía la historia de Milagros Ramírez, una niña que estaba luchando contra una enfermedad crónica, que le diagnosticaron en el 2020. Con profundo pesar sus padres confirmaron el peor desenlace: el viernes último "Mili" falleció, a sus 13 años.
Su muerte generó mucha angustia y tristeza en las comunidades de Tabossi y Crespo. Su familia llegó y se afincó en esta ciudad. De hecho, Milagros nació en Crespo; aunque hace unos años el jefe de familia quedó sin trabajo a causa de las ausencias por acompañar a su hija a los estudios médicos para la detección e inicio del tratamiento, y debieron mudarse a Tabossi. Dicha comunidad les abrió posibilidades laborales y los cobijó socialmente en este largo proceso de reconstruir el estado de salud de la pequeña.
Milagros concurría a la Escuela Nº 54 "Tomás Guido", y casi como una paradoja del destino -cuando aún no había sido diagnosticada-, a su corta edad fue colaboradora de la ONG Pelucas de Esperanza -Filial Crespo-, regalando mechones de sus cortes de cabello para la creación de pelucas para infantes oncológicos.
En julio de 2023, Milagros había afrontado con éxito un trasplante de médula, que se practicó a raíz de la donación que le efectuó su papá Javier. Si bien el primer semestre había sido favorable para su evolución, le siguieron complicaciones: "El 3 de enero de 2024, volvimos con ella a Buenos Aires, más precisamente al Sanatorio Sagrado Corazón, para llevar adelante los controles pos-trasplantes. Milagros se empezó a sentir mal, por lo que quedó internada. Después de varios estudios de alta complejidad, nos confirmaron que la enfermedad había vuelto y más agresiva que antes de la intervención", contó el papá, a días de la tremenda pérdida.
"Es muy triste todo, porque el trasplante había prendido muy bien, al 100% con mi médula, pero quedó una célula maligna y eso generó que la enfermedad volviera, con más fuerza destructiva que antes", explicó.
"Era muy pronto aún el trasplante realizado, como para iniciar un tratamiento oncológico que prometa buenos resultados a su salud. Mili tomó la decisión de no seguir con el tratamiento y regresar a Entre Ríos", recordó Javier y agregó: "Lo hablamos con mi señora y como papás respetamos su voluntad, ya que Milagros estaba cansada de 4 años de lucha intensa y nos decía que su cuerpito no soportaba más tratamiento".
Aquel acto de amor que llevó a Javier Ramírez a ser el donante de médula para su hija, junto al incondicional acompañamiento de su mamá Marta, es atesorado a nivel familiar; aunque un desconsuelo los golpea desde este 12 de abril, cuando Milagros abandonó su lucha para descansar en paz. (FM Estación Plus)