“Permaneced siempre unidos en mi amor”
Hoy comienza el Tríduo Pascual
Se conoce como Triduo Pascual al tiempo comprendido desde la tarde del Jueves Santo, hasta la madrugada del Domingo de Pascua, en donde se celebran los tres grandes misterios de la redención, La Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Para la liturgia católica la celebración del “Triduo Pascual” es una sola celebración que empieza el jueves con la Misa de la Cena del Señor, la institución del Sacramento de la Eucaristía y finaliza el domingo con la Misa de Resurrección. El Triduo Pascual es el corazón del año litúrgico.
Jueves Santo: Institución de la Eucaristía
El Jueves Santo abre el Triduo Pascual. En este día la Iglesia Católica conmemora la institución de la Eucaristía en la Última Cena y el lavatorio de los pies realizados por Jesús a sus discípulos, signo de humildad.
Viernes Santo: Pasión y Muerte de Nuestro Señor Jesucristo
El Viernes Santo es el día de pasión y muerte del Señor y del ayuno pascual como signo exterior de nuestra participación en su sacrificio. La acción litúrgica se realiza en horas de la tarde con la lectura de la Pasión del Señor, la Adoración de la Cruz y la Eucaristía.
La cruz es el elemento que domina toda la celebración iluminada por la luz de la resurrección. El Viernes Santo no es día de llanto ni de luto, sino de amorosa y gozosa contemplación del sacrificio redentor del que brotó la salvación. Cristo no es un vencido sino un vencedor, un sacerdote que consuma su ofrenda, que libera y reconcilia, por eso nuestra alegría.
Ayer tuvo lugar la Misa Crismal
Como todos los Miércoles Santo la Iglesia Católica celebra la Misa Crismal, solemne celebración en la que el Obispo con todos los sacerdotes preside la misa en que se bendicen los santos óleos que luego serán entregados a cada párroco para ser llevados a sus respectivas parroquias. En nuestra Diócesis tuvo lugar en la Catedral de Gualeguaychú, presidida por Monseñor Zordán, a la que concurrieron todos los sacerdotes, motivo por el cual no se celebró misa en los templos.
La Misa Crismal es una celebración con un profundo sentido eclesial ya que el obispo como cabeza visible de la iglesia particular y sucesor de los apóstoles encabeza junto a todos los presbíteros y el pueblo de Dios esta acción litúrgica en la que son bendecidos el óleo de los catecúmenos, el ólo para los enfermos y el Santo Crisma que serán utilizados durante todo el año en las parroquias en los distintos sacramentos de la iglesia católicaa saber, Bautismo y Confirmación, Unción de los enfermos y Orden Sagrado.