POBREZA
La pobreza ascendió al 44,7% en el tercer trimestre
Los datos fueron aportados por el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (UCA). Casi el 63% de los niños y adolescentes del país son pobres.
De acuerdo a la medición del Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA) de la Universidad Católica Argentina (UCA), la pobreza subió en el tercer trimestre de este año al 44,7% y el 62,9% de los niños y adolescentes del país son pobres.
En tanto que la indigencia quedó a poco de llegar al 10% (registrando 9,6%) y la calidad de empleo se deterioró a niveles del año 2004, con un 33,1% de la población desempleada o con empleos inestables.
La nueva cifra publicada por el Observatorio de la UCA creció 1,6% respecto a septiembre de 2022 cuando la pobreza estaba en el 43,1% y la indigencia en el 8,1%.
El director del Observatorio, Agustín Salvia, precisó que para el año próximo "se abre un escenario en el que la pobreza va a seguir aumentando, no de manera explosiva, sino en niveles similares al crecimiento que tuvo en los últimos dos años".
"Estamos en presencia de una crisis que marca un fin de ciclo, gobierne quien gobierne", afirmó Salvia. Un fin de ciclo que duró 20 años desde 2003 fomento el consumo y las ayudas estatales más que el crecimiento y la inversión, la síntesis de ese proceso fue "un comienzo que fue próspero, a lo que le siguió un período de estancamiento y finalmente entró en franca decadencia", argumentando que "si esto sigue así, aumentarán los pobres a costa de una reducción de las clases medias".
Consultado acerca de lo que pueda hacer un futuro gobierno de Javier Milei, advirtió que en el corto plazo habrá "un ajuste en los precios relativos" que incidirá negativamente en los niveles de pobreza e indigencia, mientras que en el mediano y largo plazo "no se sabe a dónde va a llegar, pero si es exitoso tiene la potencialidad de crecimiento".
"Hay un consenso que algo se está haciendo muy mal y hay que cambiarlo", aseguró y precisó que "si esto sigue así, habrá un aumento de nuevos pobres por descenso de clase medias bajas, pobreza más estructural y mayor dependencia de los pobres extremos y las clases bajas de la asistencia pública".
"Desde hace mucho tiempo que la economía argentina no garantiza un crecimiento estable y prolongado de manera sostenible, durante los últimos 23 años el crecimiento promedio per cápita apenas fue del 0,73% anual, claramente deficitario para atender deudas sociales históricas". agregó.
El resultado de ese bajo crecimiento es que "ciclo tras ciclo la sociedad argentina viene acumulando una pobreza estructural, crónica y persistente, con brechas de desigualdad que ponen barreras a los acuerdos sociales y políticos", señaló Salvia.
"El 35,9% de los hogares recibió alguna asistencia social en 2023, esto representa alrededor del 46,7% de las personas dentro del universo analizado", y acotó que "la asistencia social adquiere mayor relevancia en los estratos más bajos, con déficits educativos, en condición de pobreza y/o inseguridad alimentaria, así como en el conjunto de unidades domésticas con presencia de niños y niñas".
A diferencia del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), que mide la pobreza por ingresos, la medición del ODSA comprende seis dimensiones: alimentación y salud, vivienda digna, acceso educativos, acceso a servicios básicos, acceso a un medio ambiente saludable y empleo y seguridad social.