Mar del Plata
"No quiero mujeres juezas", dijo al tribunal el abogado de un abusador
Al letrado no le pareció que fuera justo que hubiera una mujer en un juicio por abuso sexual. Su defendido fue condenado a 6 años.
El abogado de un abusador hizo un planteo que no pasó desapercibido a los jueces. Después de aclarar que no se trataba de una cuestión personal, el defensor aseguró que no le parecía correcto que uno de los tres jueces del Tribunal que tenía que juzgar el caso de un abuso intrafamiliar fuera una mujer.
Ruben Fernández, el abogado, lo dijo por la jueza Mariana Irianni, integrante, junto a los jueces Juan Manuel Sueyro y Fabián Riquert, del Tribunal Oral en lo Criminal 3 de Mar del Plata, que además de brindarle una respuesta rotunda indicó al Colegio de Abogados que capacite a sus matriculados en materia de género.
"Claramente la única y huérfana razón que sustenta esta improcedente solicitud obedece solamente a una profunda ignorancia -sostuvo la jueza Irianni-. Ignorancia que hay que neutralizar con educación".
Al momento de fundamentar el voto que terminó con una condena de seis años de prisión para un hombre que abusó a la hija de su pareja, la jueza destacó que la decisión del Tribunal haya sido unánime, lo que demuestra -dijo- que "el género no implica disidencias sustanciales a la hora de resolver".
El abogado defensor, al hacer su inusual planteo, explicó que en un juicio sobre un delito contra la integridad sexual en el que había participado, otra jueza había dictado una resolución que en segunda instancia había sido revocada.
Irianni le preguntó si se trataba de una cuestión de índole personal, Fernández respondió: "No quiero mujeres juezas ... (se trata de un abuso sexual intrafamiliar)". Pero no llegó a pedir su recusación.
"El planteo del defensor permitiría concluir que mi imparcialidad se pondría en duda solo por mi condición de ser 'mujer'. Esta lógica hace que me pregunte: ¿Es el sexo-masculino el único que garantiza la imparcialidad? ¿Es el género femenino arbitrario? ¿Es el género el único parámetro para medir la idoneidad en cualquier función pública o privada? Para todas las preguntas la respuesta es: ¡¡¡NO!!!".
Afirmó la jueza que la solicitud de Fernández obedece a "una profunda ignorancia de la realidad, en especial sobre la necesaria perspectiva de género que es saludable esperar de las integraciones, muy en especial de los cuerpos colegiados".
Los jueces que integran el mismo Tribunal expresaron que la manifestación del defensor "de caracter general respecto al género del juzgador/a posee un sesgo discriminatorio, ya que ataca por el solo hecho de tratarse de una mujer".
"La expresión, como lo dijera en la audiencia, no se extendió a los otros dos miembros del tribunal varones, que hemos tenido sentencias confirmadas, pero también revocadas", sostuvo Riquert: "En un universo más general como lo planteara el abogado, a miles de jueces varones les han revocado sentencias, y ello no inhibe a que otros jueces varones entiendan en otras causas", señaló.
"No voy a hacer la defensa de mi colega que me consta se defiende muy bien sola y no necesita de ninguno de los jueces -varones- que integramos este Tribunal. Sí me preocupa que en el ejercicio de la abogacía local se realicen este tipo de manifestaciones en una sala de audiencias", agregó.
Por eso, a partir de la obligatoriedad de la aplicación de la Ley Micaela para todos los poderes públicos, en el que está comprendido el Colegio de Abogados, concluyeron los jueces que resulta de "vital importancia" que sus matriculados se capaciten en materia de genero "a los fines de erradicar este tipo de expresiones vinculadas con estereotipos superados para una correcta litigación".
La Ley Micaela o Ley de Capacitación Obligatoria en Género para todas las personas que integran los tres poderes del Estado, N° 27499, fue promulgada en 2018 tras un proceso que surgió a partir del femicidio de la adolescente Micaela García, en 2017 en Gualeguay, Entre Ríos.
Irianni sostuvo finalmente que desacreditar el rendimiento o la función de cualquier ser humano por el género en términos biológicos (o cualquier otro motivo externo a sus capacidades intrínsecas) debería ya estar diluido en cualquier ámbito, pero más aún en el marco de profesionales expertos en leyes.
La jueza celebró "poder integrar este Tribunal con mis colegas, hombres respetuosos del género que cada uno porta. Y ciertamente me cuestiono cuándo habrá en las designaciones judiciales de mi ciudad un equilibrio equiparable a la ley de cupo (de los cuerpos legislativos) o a la exigida en la Ley de juicio por Jurados, normas que sabiamente han contemplado esta circunstancia".
Y lamentó: "A lo largo de los 34 años que llevo en la Justicia y habiendo pasado por varios Departamentos Judiciales y numerosas funciones, no es la primera vez y seguramente no será la última que alguien diga: "¡Vos NO porque sos mujer!".
"Lejos de pretender sancionar la ignorancia -dijo Irianni-, hay que neutralizarla. Primero tomando noción de esa ignorancia para luego poder integrar las diferencias, con educación, solo así se puede hacer un espacio nuevo en la conciencia que cambie el paradigma". Instó entonces para que se capacite en perspectiva de género a los colegiados en general, "en especial al doctor Fernández".