Perú expulsará delincuentes extranjeros y los jóvenes harán el servicio militar
El nuevo presidente de Perú dio a conocer algunas de sus ideas ante otros mandatarios, entre los que estaban Alberto Fernández
El nuevo presidente de Perú, el izquierdista Pedro Castillo, dio el miércoles su primer discurso ante la nación, en el que delineó cuáles serán sus prioridades al frente del ejecutivo del país sudamericano.
El maestro rural de 51 años prometió profundas reformas pero insistió en que no busca "estatizar" la economía del país minero.
Uno de los ejes de la alocución del mandatario, quien asumió en una sobria ceremonia, fue reafirmar su voluntad de enviar al Congreso un proyecto para reformar la Constitución promulgada en 1993 por el entonces mandatario Alberto Fujimori.
Tras afirmar que Perú no puede estar "condenado a seguir prisionero de esta Constitución" de 1993, Castillo declaró: "Anuncio que presentaremos ante el Congreso de la República [...] un proyecto de ley para reformarla".
"Presentaremos ante el Congreso, respetando el procedimiento de reforma constitucional, un proyecto de ley. Esperamos que pueda ser aprobado y ratificado en referéndum", remarcó tras señalar que la Asamblea Constituyente se dedicará a elaborar un proyecto de Constitución producto del debate político
En materia económica, Castillo afirmó que "ni remotamente" pretende estatizar la economía, como advirtieron muchos de sus rivales políticos, y que buscará lograr las reformas "con responsabilidad". Entre ellas prometió que buscará mejorar los acuerdos de libre comercio priorizando "los intereses del país".
Si bien el tono de sus primeros comentarios fue moderado, Castillo anunció que su Gobierno tratará de sacar adelante proyectos mineros que contribuyan más a la economía local y a un mayor gasto fiscal para educación y salud, con reglas claras.
"Lo que nosotros propugnamos es que se acaben los abusos de los monopolios, de los consorcios que corrompen y cobran sumas artificialmente elevadas por los bienes y servicios básicos, como el gas doméstico y las medicinas", indicó.
Los planes de Castillo, adelantados durante su campaña electoral, sacudieron a la elite económica después de más de tres décadas de políticas favorables al mercado que han convertido al país en un refugio relativamente seguro en la volátil América Latina.
Castillo también se refirió a la situación educativa, y anunció que declarará a la educación pública "en emergencia educativa", por lo que duplicará el presupuesto destinado al sector. Además de anunciar la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología, dijo que cambiará el nombre del ministerio de Cultura a ministerio "de las culturas".
En uno de los pasajes que generaron sorpresa, el izquierdista afirmó que aquellos jóvenes que no trabajen ni estudien, también conocidos como "ni-ni", deberán realizar el servicio militar obligatorio. Además, agregó que planea reforzar los programas voluntarios de servicio militar.
Finalmente, cerró su discurso exhortando a dejar de lado las diferencias ideológicas. "Convoco a todos los peruanos, hombres y mujeres de esta patria para decirles que es tiempo de la gran unidad nacional".
Castillo-Fernández
El presidente Alberto Fernández mantuvo hoy un encuentro bilateral con su par peruano, Pedro Castillo, en el Centro de Convenciones de Lima, en lo que significó una de las primeras audiencias que ofreció el flamante mandatario luego de haber asumido la jefatura del país andino.
"Más allá de las diferencias, estoy muy contento, me pareció un buen discurso, con mucha proyección de futuro; de verdad nos podríamos sumar a las palabras de Castillo. Sabemos dónde están los problemas y las dificultades. Ha quedado al descubierto la importancia del Estado, y me parece que el mensaje ha sido muy claro", señaló el Fernández tras participar en el Congreso de la República de la sesión solemne de transmisión de mando a quien triunfara, con el 50,13 por ciento de los votos, en el balotaje del 6 de junio.
Mañana, antes de su regreso a la Argentina, Fernández y su comitiva participarán del juramento simbólico que Castillo hará en el Santuario Histórico de la Pampa de Ayacucho, donde el 9 de diciembre de 1824 se libró la batalla que significó la independencia de Perú y del resto de América.