Prisión preventiva
Prisión preventiva para acusados del homicidio de un chico
Los dos acusados del homicidio de Pablo Vega, ocurrido el viernes en barrio Belgrano de Paraná, fueron imputados y quedaron con 45 días de prisión preventiva.
La investigación por el asesinato de Pablo Vega sigue adelante y ahora espera los resultados de pericias importantes para consolidar la hipótesis principal de la Fiscalía, que apunta contra los dos detenidos como el conductor de la moto y el acompañante que ejecutó los disparos que terminaron con la vida del adolescente de 16 años, en Paraná. Este lunes el fiscal Juan Manuel Pereyra indagó a Elías Nazareno Ledesma y a Rodrigo Alejandro Ramón Retamal como coautores del homicidio, y luego se acordó con las defensas la prisión preventiva de ambos.
Según se informó, los jóvenes de 21 y 22 años acordaron la medida cautelar por el término de 45 días: Ledesma la cumplirá en la Unidad Penal 1 de Paraná y Retamal en la Unidad Penal Nº 7 de Gualeguay.
Según la imputación, el primero era quien conducía la moto y el segundo quien efectuó los disparos mortales, que a la 1.30 de la madrugada del viernes pasado causaron la muerte de Vega, en el corazón del barrio Belgrano de Paraná.
Tal como se había informado, la víctima se encontraba en la esquina de su casa, en inmediaciones de la plaza del barrio, cuando se acercaron los agresores en una moto. El adolescente empezó a correr pero fue alcanzado por balazos en su espalda, que le afectaron órganos vitales y no le dieron oportunidad ni de pelear por su vida.
En la investigación del hecho a cargo de Pereyra junto al personal de la División Homicidios, se había detenido a Ledesma pocas horas después del hecho y quedó representado en la causa por el defensor oficial Sebastián Ludi; en tanto, Retamal se entregó en horas de la siesta del viernes en la Fiscalía, acompañado por su abogada defensora particular, Candela Bessa.En los diferentes procedimientos no se pudo localizar aún el arma de fuego utilizada para el ataque criminal, aunque hay indicios: por un lado, en la autopsia practicada al cuerpo de la víctima se extrajo un plomo que fue remitido a la Dirección Criminalística, el cual se peritará para poder establecer el calibre del arma que lo disparó, al tiempo que se cotejará con el registro balístico que tiene la Policía, con el fin de poder establecer alguna relación con hechos delictivos previos. Por otro lado, un testigo mencionó que el arma que empuñaba el asesino podría ser un revólver calibre 38, pero esto carece de certezas ya que fue una apreciación de esa persona, por un vistazo de pocos segundos y a la distancia.
En cuanto a los testimonios, si bien al inicio de la pesquisa costó encontrar a las personas que estaban con la víctima, o mas bien costó que reconocieran que estuvieron al momento y en el lugar del hecho, en la causa se cuenta con al menos seis declaraciones de jóvenes, algunos menores, que aportaron relatos importantes tanto sobre el ataque a balazos como sobre circunstancias que precedieron al homicidio y que podrían explicar el motivo.
Creen que podría haber existido una pelea entre Pablo Vega y el acusado de tirar a matarlo, un rato antes del crimen en el mismo barrio Belgrano.
Luego de la imputación, en la que ambos acusados se abstuvieron de declarar y dar sus versiones, Retamal acordó la prisión preventiva por 45 días, en tanto había más discusión respecto a la situación de Ledesma, quien pretendía una medida cautelar más leve, como una domiciliaria, pero al final ambos firmaron el encierro por un mes y medio.
Al finalizar este plazo se volverá a discutir si se prorroga (lo cual la Fiscalía pedirá casi con seguridad) o si se imponen medidas de otro tipo. Por ahora, la prisión parece ser la mejor forma de proteger una investigación que cuenta con varios testimonios que temen por su integridad.