San Roque
Quién fue San Roque y por qué se lo celebra hoy
Este peregrino francés se convirtió en el patrono de los perros, las mascotas y los enfermos; una oración para rezar en su onomástico
El día de San Roque, patrono de los perros, las mascotas y los enfermos, se celebra todos los 16 de agosto, onomástico que la Iglesia Católica dedicó a este peregrino francés canonizado, que vivió entre el siglo XIV y el XV.
Nació en el año 1378 en Montpellier, donde su padre era gobernante. Pasó sus primeros años en esta ciudad del sur de Francia, pero a los 20 años quedó huérfano de ambos padres. Entonces, decidió seguir los votos cristianos de pobreza y entrega a los humildes. Luego de repartir la fortuna familiar entre personas que lo necesitaban, emprendió el camino del peregrino hacia Italia, al tiempo que ayudaba a los enfermos de la peste en esa región.
Contrajo la enfermedad durante su estancia en Piacenza. Sintió que moriría, y para no ocupar una cama de hospital se recluyó en una cueva a esperar los momentos finales. Pero fue entonces que un perro comenzó a acudir periódicamente a la caverna para alimentarlo con una hogaza de pan, lo que lo mantuvo con vida. Finalmente, el dueño de la mascota acabó encontrando al can y el futuro santo, a quien llevó a su casa para curarlo.
Mientras su fama de curandero y elegido de Dios se acrecentaba en Italia, decidió regresar a Montpellier. Pero en su ciudad natal había guerra, y al ser confundido con un espía, Roque fue apresado. Pasó cinco años en la cárcel, donde se mostró piadoso hacia sus compañeros de encierro y rezó por la salvación de sus almas hasta que murió, el 15 de agosto -Día de la Asunción de la Virgen María- del año 1378.
Su verdadera identidad se reveló cuando se lo preparaba para el entierro. Entonces, los sepultureros descubrieron una señal de la cruz trazada por su padre en su infancia que lo identificó como el descendiente de la familia gobernante. Por eso, sumado a su fama de hombre piadoso, una multitud lo acompañó al cementerio, camino a su descanso eterno.
Sobre su tumba comenzaron a producirse milagros, que acrecentaron su popularidad y le dieron fama de santo. En 1485 se trasladaron sus restos a Venecia, ciudad de la que también es patrón. En 1584, fue canonizado por el Papa Gregorio XIII. Debido a su historia de vida, se le consagró como uno de los tres patrones del peregrino, junto a San Cristóbal y San Rafael, así como el santo de los perros, las mascotas y los enfermos.
Una oración a San Roque
Oh glorioso San Roque, que por vuestro ardiente amor a Jesús habéis abandonado riquezas y honores y buscasteis la humillación, enseñadme a ser humilde ante Dios y los hombres. Alcanzadme la gracia de apreciar en su debido valor las riquezas y los honores de la vida para que no sean para mí lazos de eterna perdición.
Os lo pido humildemente, oh glorioso San Roque, para que seamos dignos de seguiros en el camino que lleva a la salvación eterna.
Libradme de toda enfermedad corporal. Alcanzadme el favor que os pido si es para honra vuestra, gloria de Dios y salvación de mi alma. Amén.