Se flexibilizan las exportaciones de carne a partir de hoy
De acuerdo con estimaciones privadas, se espera un ingreso extra de divisas que oscilará entre los USD90 millones y USD130 millones, que en concepto de derechos de exportación aportarán cerca de USD13 millones adicionale
Con la flexibilización al cupo en exportaciones de carne bovina, que comienza hoy, el Gobierno inaugura un nuevo perfil de relación con el campo, mientras espera incrementar el ingreso de divisas en la recta final del año.
A partir del anuncio de Agricultura, el precio de la vaca en el Mercado de Liniers empezó a subir y habrá más presión sobre esta categoría en la medida en que los frigoríficos exportadores empiecen a vaciar sus cámaras.
De acuerdo con estimaciones privadas, se espera un ingreso extra de divisas que oscilará entre los USD90 millones y USD130 millones, que en concepto de derechos de exportación aportarán cerca de USD13 millones adicionales. En el plano político, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, empezó en estos días a recorrer el país para analizar junto a los gobernadores medidas para darle impulso a la producción.
La cartera agropecuaria pone en práctica la línea argumental de la Casa Rosada, que busca elevar los rangos de producción para mantener el nivel de consumo interno y no descuidar el frente exportador. Las entidades de la Mesa de Enlace manifestaron su desacuerdo con el anuncio, pero por el momento no anunciarán medidas de fuerza.
En el apartado comercial se empieza a percibir una mejora en el precio de la vaca que se vende en Liniers, que en una semana aumentó un promedio de $9 en todos los renglones que componen esta categoría. En ese ámbito calcularon que a partir de la flexibilización del cupo su cotización se podrá incrementar hasta un 20%, impulsada por una menor disponibilidad de animales en esta época del año y por una demanda china que apretó el acelerador.
El menor ingreso de vacunos empieza a tener un impacto en los precios. La semana pasada se comercializaron en Liniers 14.023 cabezas, número muy por debajo de las cifras habituales para esa plaza. En este punto, se percibe el efecto tanto de la caída de 1 millón de cabezas en el stock bovino nacional como de la caída en los niveles de encierre en los feedlots, principales proveedores del consumo interno.
En las pasarelas del mercado concentrador porteño se empieza a registrar una tónica alcista.
Mientras que el promedio de la vaca conserva buena aumentó $2, con un techo de $135, la conserva inferior aumentó $3 promedio y el techo en este período pasó de $112 a $126. Este nuevo escenario de precios en las categorías destinadas a China no tendrá impacto en la hacienda de consumo. Con las ventas planchadas en las carnicerías, los mostradores no convalidan más subas en el precio del kilo vivo en pie.
El otro número que esta cadena de valor sigue de cerca refiere en saber a cuánto cerrará 2021 el volumen de exportación de la industria. Analistas del sector consultados por BAE Negocios proyectaron que serán cerca de 800.000 toneladas, por debajo de las 900.000 toneladas despachadas el año pasado, que generaron divisas por USD2.710 millones.
La restricción a las ventas externas comenzó a finales de mayo, a través de la Resolución 408/2021, que limitó los envíos de vaca a China, un listado de siete cortes parrilleros de esa categoría, novillo no Hilton y cupo kosher con destino a Israel.
En las últimas semanas se liberaron 3.500 toneladas de la cuota israelí y Agricultura anunció el 28 de septiembre que se venderá más vaca al gigante asiático.
Con el anuncio, los exportadores pasarán de despachar cerca de 30.000 toneladas mensuales a casi 60.000 toneladas. INFORME CIARA-CEC
La liquidación del agro fue récord para un septiembre La liquidación de divisas en septiembre llegó a USD2.444 millones, lo que si bien representó una caída de 20% en relación con el mes previo marcó una suba de 36,5% con respecto al mismo mes del año pasado. En los primeros nueve meses del año, el complejo agroexportador facturó USD25.670 millones, un 69,6% más con respecto a 2020, de acuerdo con estadísticas de Ciara-CEC.
La cadena exportadora de granos logra suplir con los precios internacionales un escenario complejo en donde se combinan factores como la baja en la producción sojera, las medidas de fuerza gremiales de trabajadores portuarios y la bajante en el río Paraná, que hasta el momento causó pérdidas por USD620 millones según cálculos de los industriales.
El ingreso de dólares es impulsado por los subproductos del complejo sojero y por el maíz. En el primer caso, más allá de los vaivenes en los precios internacionales, harina y aceite de soja permiten sostener el ritmo de las exportaciones. Por el lado del maíz, las exportaciones de grano se mantienen en niveles récord, impulsadas por un volumen de cosecha 2020-2021 que no se vio afectada por las incidencias climáticas.
Por Andres Lobato