SANTA FE
¡Pedro Candioti!... Todo dicho
Santa Fe le rinde homenaje a un gran deportista nacido en nuestra tierra hace 128 años. A su memoria y en honor a su natalicio, se celebra el día del deporte en la provincia.
Hoy se cumple el 128 aniversario del nacimiento de don Pedro Antonio Francisco Candioti, en esta capital. Aunque en estos tiempos resulta sorprendente por la baja altura de los ríos, en esa época Santa Fe estaba rodeada por agua y allí aprendió a nadar a los ocho años de edad en el arroyo El Quillá, hoy desaparecido, que junto con el riacho San Francisco, formaban por aquél entonces el límite del tradicional barrio sur.
Cuando tenía 15 años realizó su primera actividad deportiva al participar en varias pruebas organizadas por el Club de Regatas Santa Fe, la primera entidad a la cual representó, que tenía su sede en el lugar. Fue allí donde perfeccionó la técnica y el estilo bajo la dirección del profesor Constancio Pizingrilli.
En 1913, además de la natación que lo haría mundialmente famoso, practicaba atletismo, fútbol y remo, teniendo preferencia por este último con el que triunfó, para la entidad verde-oro, el 11 de septiembre de 1916, en la Copa La Marina, en el Tigre, en un equipo integrado por Pedro Mirassou, Carlos Bianchi, Octavio Pacheco, Atilio Copes y el propio Candioti. El primero de ellos es quien años más tarde se convertiría en famoso tenor del Teatro Colón, habiendo interpretado "La Marsellesa", de George Bizet, en una función de gala organizada por el gobierno argentino para celebrar la fiesta patria francesa.
Debe señalarse que las estadísticas deportivas del "Tiburón del Quillá" fueron llevadas por Domingo Pallavidini, amigo y colaborador de Candioti en numerosas de sus pruebas. Las mismas se iniciaron el 20 de abril de 1916 y registra las 64 competencias realizadas por el nadador local en las tres décadas que le siguieron.
Al propio tiempo, se indica que de todas las marcadas registradas oficialmente se pueden citar las siguientes: entre el 4 y 5 de marzo de 1922 realizó 75 kilómetros desde Santa Fe al lago Coronda en 13 horas 34 minutos. Al año siguiente, del 17 al 18 de febrero consiguió el título de campeón mundial de largo aliento cuando nadó los 104 kilómetros existente entre esta ciudad y Puerto Aragón en 26 horas 1 minuto.
Una temporada más adelante, Candioti intentó el cruce del Río de la Plata, nadando desde Colonia a kilómetro 37, donde debió abandonar a las desfavorables condiciones climáticas, cubriendo 29,5 kms., en 14 horas 3 minutos. Entre el 21 y 25 de febrero de 1925 unió Santa Fe con Rosario en 35 horas 2 minutos, superando por casi nueve horas la marca del hasta entonces campeón mundial, Sullivan, en esos 158 kilómetros.
Al año siguiente, desde el 12 al 15 de marzo realizó la primera tentativa de unir Santa Fe con Buenos Aires, que finalizó en Puerto Alsina después de haber recorrido 345 kilómetros en 71 horas 55 minutos. Con relación al segundo intento, Don Pedro lo llevó a cabo entre el 27 de febrero y el 1 de marzo de 1932, terminando en la desembocadura del río Gualeguay, en la provincia de Entre Ríos, con un recorrido de 355 kilómetros empleando 61 horas 45 minutos.
Por otra parte, entre el 20 y el 24 de febrero de 1935, el prestigioso nadador santafesino ejecuta el tercer raid que esta vez finaliza en Zárate (Buenos Aires), tras 381 kilómetros y empleando 87 horas 19 minutos
El biógrafo porteño Horacio Estol indicó que el cuarto intento se llevó a cabo del 21 al 24 de febrero de 1936 concluyendo en la boca del río Baradero, después de recorrer 305 kilómetros con una marca de 65 horas, 35 minutos.
Al mismo tiempo, el escritor señaló en el libro "Pedro Candioti, El Tiburón del Quillá" que desde 1940, el proyecto de llegar a Buenos Aires nadando cambia de lugar de lanzamiento y se comenzó a patrocinar la unión de las ciudades de Rosario y Buenos Aires, unión que conseguirá realizar en el juego del 13 al 16 de marzo de 1946, después de luchar con las aguas del Paraná y del Río de La Plata en 75 horas 18 minutos y de recorrer 318
kilómetros. La idea original, tras un sueño de muchos años de su existencia era la de llegar a Puerto Nuevo, pero fue retirado a la altura del estadio de River Plate, en el barrio de Belgrano.
Una de las grandes proezas de Don Pedro Candioti aconteció del 19 y el 23 de febrero de 1939, cuando llevó a cabo exitosamente el intento que le otorgaría la fama universal y el reconocimiento por el que aún hoy se lo recuerda, con 46 años de edad, unió San Javier-Santa Fe, nadando 100 horas y 33 minutos, logrando establecer el récord mundial de permanencia en aguas abiertas.
En la cuarta noche sin dormir del nadador fue necesario darle café para reanimarlo; a la madrugada entraron en Colastiné y a las 4 don Pedro superó su mejor marca: 87 horas, llegando a las 90 horas de nado. Desde ese momento, todo el barco fue ruido y música para animar al nadador, al que se le entrecerraban los ojos, incluso llegó el "Flaco" Norberto Victorio Zen, a tocarle el Himno Nacional con su armónica, Pedro estaba casi inconsciente, de pronto llegó una lancha desde esta capital con su hijo
Julio a bordo, quien se arrojó a las aguas y lo alentó al grito de ¡"Vamos papá! Gesto que lo hace reaccionar para seguir con sus brazadas. A las 96 horas del intento Don Pedro estaba en el riacho Santa Fe y en medio de los gritos de los pescadores del lugar igualó el récord mundial que tenía el norteamericano Morris Kella, desde hacía ocho años. A la sirena del barco la hizo sonar Francisco Chimino, que anunciaba las 100 horas de nado y 33 minutos.
Su arribo frente a las instalaciones del Club de Regatas fue apoteótico ante la algarabía de la gente, donde las autoridades de la institución le brindaron su gran hospitalidad y además lo recibió el Gobernador de Santa Fe, Manuel María "Manucho" De Iriondo y toda la comunidad, porque Don Pedro, a los 46 años cumplía con la hazaña saliendo del agua por sus propios medios estableciendo dicha plusmarca universal que era un verdadero orgullo para el Club Náutico El Quillá, la ciudad, la provincia de Santa Fe y el propio país.
Mientras de la propia embarcación, el inolvidable Miguel "Pirito" Marra, compañero incondicional del "Tiburón del Quillá" (también fue presidenten del Club Kimberley), arrojaba al aire bombas de estruendo para celebrar tan grato acontecimiento, con cánticos, bailes y una alegría desbordante de sus amigos.
El mejor homenaje que le podía tributar el estado santafesino a la figura de Don Pedro Antonio Candioti, fue la institución del 24 de julio como "Día Provincial del Deporte".