De imitar a Shakira en el recreo y a Lía Crucet en un 15 con ropa hecha por su bisabuela a ser la revelación de ShowMatch: Iván Ramírez
Tiene nada más que 22 años y es el hombre detrás de Hugo Moyano y Axel Kicillof en Politichef y otros personajes como El Mono de Kapanga, El Polaco o El Dipy en La Academia y Bienvenidos a Bordo
"Figura Pública - Lomas de Zamora - Actor/Imitador (22 años)", se describe en pocas palabras Iván Ramírez en su cuenta de Instagram donde cosecha más de 200 mil seguidores Aunque para muchos también es conocido como "Beto Casella, el Mono de Kapanga y DJD de Bienvenidos a bordo", "Ángel de Brito y El Polaco de La Academia" o "Hugo Moyano y Axel Kicillof de Politichef".
Detrás de las máscaras, los maquillajes y las pelucas está él, "el nene que a los siete años miraba ShowMatch y soñaba con estar al lado de Tinelli": "Veía cómo mi familia miraba el programa y se reía y se olvidaba de las cosas y pensaba que yo quería estar ahí y que la gente la pase bien y se olvide de lo que pasó en el día", contó el actor a Teleshow para quien todo comenzó como un juego entre amigos y que gracias a la ayuda de su familia, especialmente de su bisabuela y de sus abuelos, pudo transformar en su trabajo.
A tres semanas de su debut en ShowMatch, donde ya desplegó varios personajes, se siente feliz con las repercusiones: "No lo puedo creer, fue increíble y escuchar los puntos de vista de la gente me genera alegría y decís 'el proceso y el trabajo, el tiempo que llevó, valió la pena' y eso es un mimo al alma. Soy el nuevito, todos son actores formados de hace tiempo y yo los los sigo y fueron mis referentes todos los humoristas y con 22 estar ahí... es fruto del laburo y una oportunidad".
"Estoy re feliz, es un sueño cumplido", dijo y contó que ya lo empezó a reconocer gente en la calle. Todo comenzó cunado estaba en la primaria y luego en la secundaria de la escuela San Francisco Javier, de Lomas, barrio en el que sigue viviendo, aunque ahora a dos cuadras de su casa de toda la vida . "En ese momento imitaba a las profesoras y pensé que si podía hacerlas a ellas, también a un famoso. En el primer año de la secundaria mis amigos me insistieron y empecé a buscar, hice a Shakira y a Iúdica, que en ese momento estaba muy fuerte el Soñando. Mis amigos se reían mucho, nos juntábamos en el recreo, me proponían personajes y fui renovando stock y de golpe, yo que lo estaba haciendo con ellos, tenía a todo el colegio mirando".
"Esto me encanta y ahora quiero que me conozcan en mi barrio y en Buenos Aires y Argentina y que me conozca todo el público", pensó determinado en uno de esos recreos. Así, un compañero le pidió que imitara a Messi y saludara como él, otro le sumo otro personaje e Iván armó un repertorio que no solo le permitió desplegar su arte, sino vencer su timidez: "No tenía muchos amigos y en los actos no me gustaba participar, pero cuando empecé a hacer esto y me gustó, lo llevé a cabo en todo sentido, si tenía que dar una lección oral actuaba y pensaba que el aula era un teatro y le ponía humor".
"Ponerse la máscara" como él dice, lo ayuda a quitarle la timidez a Iván: "Tengo mi caradurez, pero soy muy distinto a lo que ven", admitió quien a los quince pudo hacer su primer show, en donde comenzó a incorporar maquillaje y vestuario a su voz y gestos. "Me llamó el papá de una amiga para actuar en sus quince, a ella le gustaban Lía Crucet y Abel Pintos, fui al cotillón a comprar las lolas para Lía, la peluca y como no tenía mucha plata, me pinté la barba de Abel con corcho".
Su bisabuela Noélida, apodada Negra irónicamente por su pelo blanco, fue su vestuarista y se quedó toda la madrugada cociendo el vestido para Lía y Mario su abuelo hizo las veces de utilero elaborando con madera un pie para un micrófono. El resto del equipo de producción lo integraron su abuela Silvia y sus papás Karina, de quien heredó la parte creativa y Fabián de quien sacó el humor. Al día de hoy, siguen siendo su primera fuente de consulta cada vez que encara un nuevo personaje.
"Mi equipo era mi familia, decía 'tengo que hacer a tal' y mis abuelos recortando, armando, es algo hermoso. Nunca recibí una critica mala de mi familia, desde el primer momento me apoyaron y actúo para ellos para que vean a aquel nene de 7 años esta hoy al lado de Tinelli", dijo el mayor de cuatro hermanos (Agustín de 18, Franco de 15 y Camila de 8 que le enseñó a usar TikTok y se perfila como artista) que en más de un evento familiar hizo a la Güera para su bisabuela y a Cacho Castaña y Sandro para sus abuelos.
Aunque desde aquel 15 que animó siempre trabajó haciendo shows, al terminar la secundaria comenzó el profesorado de historia ya que creía que un título podría ayudarlo en caso de no prosperar su pasión. Con excelentes notas, antes de terminar el primer año hizo un click, dejó los libros y decidió dedicarse al cien a sus personajes.
Comenzó a trabajar en Radio Vale, su hermanita lo ayudó con las redes sociales donde comenzó a ganar popularidad y así estuvo dos años en Bendita, como alter ego de Beto Casella.
La pandemia lo encontró recién mudado y solo en su departamento. La situación lo ayudó a reinventarse: "Siempre me gustó dibujar y hacer caricaturas y dije, 'si lo puedo hacer en un papel, por qué no sobre mi cara', compré maquillajes y empecé a jugar con eso, me hice peluquero, maquillador... ahora llevo mi maletín a todos lados".
A la hora de armar un personaje, rescata hacerlo siempre con "respeto": "La imitación es un homenaje, estudio a las personas, les dedico tiempo y al momento de decir las cosas trato de jugar con el humor, no soy de ningún partido, no me interesa la política, trato de hacerlos tal cual son, un Axel que no redondea y sigue hablando y se va por las ramas, hacerlo de esa forma graciosa, con el latiguillo de 'se entiendo o les armo un TikTok'. Sé que es difícil verse imitado, no se si me gustaría, y capaz te da miedito".
¿Cómo es Iván sin máscaras? "Soy jodón, pero no vivo imitando porque hay que despegarse del laburo, hacer reír y lo llevo como algo nato. Vencí al nene tímido que llevaba adentro pero cada vez que voy a trabajar voy tranquilo con mi maletín, después me voy con el maletín de Don Torcuato a Lomas. Siempre el personaje que más me gusta hacer es el último, la paso bien con mi trabajo. ¿El futuro? Algo que siempre apunté es al teatro, dedicarme de lleno porque me apasiona y me gusta".