Gualeyos
Carolina Recalde: Experiencia Australia 1ª Entrega
¡Qué bueno animarse! En el 2022 me decidí a irme a conocer otro país y decidí Australia por sus paisajes, la oportunidad de trabajo y por amigos que ya vivían acá.
E 8 de diciembre tomé el avión en aeroparque; si bien sólo eran 22 hs. de vuelo, por tema de diferencia horaria llegué el 10 de diciembre a Sydney, con el partido Argentina-Holanda siendo jugado. Le habíamos pedido al piloto que por favor nos informara como íbamos. A casi nada de llegar a destino nos avisa por auto parlante que habíamos ido a tanda de penales… y que Argentina había ganado… Fue una locura el avión festejando, abrazándonos con personas extrañas y ver llorando a más de uno.
Así empezó el viaje, con abrazos a desconocidos. Llegar a Sídney en época mundialista y dimensionar la cantidad de argentinos que eligen esta ciudad para vivir, fue todo un shock. Festejar la copa del mundo no sólo con argentinos, sino con muchos latinos en la Opera House fue totalmente una locura. Conseguir un lugar que no esté lleno y que transmitiera el partido en plena noche no fue fácil, los lugares donde se transmitía en español se llenaron rápido y sólo conseguimos uno en inglés.
En esa primera semana de hostel conocí gente de muchas partes del mundo, pero la comunidad latina es muy fuerte y se hizo un grupo grande de argentinos que me acompañaron en mis primeros tres meses en Sídney. Algo que me llamo la atención, fue que durante los meses de diciembre y enero se tiran fuegos artificiales casi todos los días, 9pm. No sólo los famosos de fin de año que duran casi 15 minutos, sino también los de cada día que duraban 1 min o más.
Contrariamente a lo que pensé, no fue tan fácil conseguir trabajo en diciembre, ya que es temporada baja porque todos los australianos dejan Sídney y se van a los lugares costeros más al norte. Sin embargo, conseguí un trabajo primero como moza en Bondi Beach, unas de las playas mas famosas y donde vas a encontrar más argentinos que nativos.
Después conseguí trabajo como profesora de inglés. Nunca imaginé la posibilidad de trabajar de lo mío acá ya que pensaba ¿a quién voy a enseñarle inglés?, si es un país de habla inglesa. Para mi sorpresa, un día me entero de un instituto de inglés que estaba cerca de donde vivía, y decidí ir con mi curriculum y darme a conocer. Estaban por cerrar por las fiestas, pero me dijeron que me tendrían en cuenta para el nuevo ciclo lectivo. Así fue como me llamaron para comenzar el 3 de enero para dictar clases en el instituto a adultos que venían con la visa de estudiante a Australia. Trabajé hasta mediados de marzo de lunes a viernes en turno vespertino, dando clases a alumnos de distintas nacionalidades, Mongolia, Indonesia, Tailandia, México, España, Colombia, Brasil, Argentina.
Fue una experiencia desafiante y muy enriquecedora por la variedad cultural. Como profesora ha sido una experiencia única que no sólo me ha dejado muchos contactos, sino que me ha dado la posibilidad de conocer gente hermosa. Con los alumnos teníamos clases normales de lunes a jueves y los viernes era distinto. De actividades diferentes, donde nos juntábamos con los otros salones a hacer desafíos juntos o hacíamos excursiones afuera del instituto, como ocurrió en la semana del año nuevo chino. Fuimos al barrio chino a ver las celebraciones por el año del conejo y probar la comida típica en esa celebración, los famosos dumpings.