Algunas reflexiones para pensar el futuro de nuestra ciudad

Es fácil constatar en el cotidiano local que aún quedan temas pendientes en nuestra ciudad. La mayoría son cuestiones que merecen la atención general de todos y un sólido consenso entre el plano político y la ciudadanía gualeya para la resolución adecuada de ellos.

Los vectores que deberían configurar un amplio plan integral para el futuro de nuestro municipio podrían agruparse en "planificación urbana", "medioambiente" y "turismo". Sin lugar a dudas, existen algunos más, pero la complejidad de abarcar todos ellos desde una columna de opinión hace imposible su mención. Claro está que son cuestiones que deben tratarse en extenso desde el plano político y social local. Allí son los lugares donde se deben dinamizar estos tópicos.

En términos de "planificación urbana", en nuestra localidad debería llevarse adelante una profunda discusión para reorganizar el polo productivo tan necesario en Gualeguay. Se torna fundamental que las empresas que lo integran no funcionen bajo implicancias que muchas veces impactan negativamente en las zonas residenciales de la ciudad. A futuro es clave una readecuación productiva y urbana en donde se equilibre el importante valor agregado que le brindan estas mencionadas empresas al municipio con el bienestar cotidiano de la ciudadanía en general. Claro está que esta ambiciosa proyección no será sencilla y requerirá de mucha inversión de recursos económicos y humanos. Pero el futuro no espera y se hace sumamente necesaria una solución consensuada en este aspecto para el progreso de Gualeguay.

En lo que respecta a la cuestión del medioambiente, es importante una alianza estratégica en Gualeguay de cuatro ejes: sector público, sector privado, sociedad civil y organizaciones sin fines de lucro. Son varios y diversos los temas a tratar en este aspecto de cara al futuro de nuestra ciudad. Desde el asunto del basural a cielo abierto en la costanera hasta el cuidado del río, pasando por la enorme cantidad de animales indefensos maltratados y abandonados en la vía pública, por citar algunos ejemplos. Sin una interrelación eficiente y duradera de los cuatro ejes citados previamente, es imposible construir un futuro sustentable para nuestro municipio. Tanto la conciencia individual de cada gualeyo hasta el accionar colectivo de todas las organizaciones estatales, privadas, con o sin fines de lucro de la ciudad son importantes para configurar un plan de acción a largo plazo y generar el desarrollo y el beneficio sustentable de todos los sectores y elementos que conforman la sociedad de nuestra localidad.

Por su lado, el turismo es un pilar fundamental para Gualeguay. Es preciso alentarlo y resguardarlo. Más aún en estas épocas pandémicas que tanto daño le han hecho a las economías regionales. Está clara la importancia del carnaval como motor imprescindible del turismo gualeyo. En este sentido, es preciso adoptar nuevas prácticas y hábitos comerciales para su modernización. Por ejemplo, acentuar, profundizar y dinamizar la digitalización en su venta y marketing.

De esta forma, aprovechar las enormes oportunidades que brindan las nuevas tecnologías para la expansión de tan espectacular producto. Ahora bien, así como la importancia del carnaval es incuestionable, también es estacionaria. En esta línea, sería ideal motorizar para el porvenir de nuestra ciudad, diversas estrategias que fomenten y promulguen el turismo durante todo el año. Emprendimientos turísticos, eventos, aprovechamiento de los espacios públicos e, inclusive, inversiones a escalas mayores como las siempre prometidas termas. Todas estos ejemplos, que pueden ser muchos más, radican en la necesidad de implementar un turismo en nuestro municipio que sea anual y continuo, no sólo estacional.

En fin, queda mucho por desarrollar en Gualeguay y cada año que llega es una nueva oportunidad para hacerlo. Para esto, es clave un plan integral a largo plazo que involucre a todos los vectores con potencial de progreso. A su vez, es fundamental también un compromiso y una alianza estratégica entre la dirigencia política y la sociedad civil gualeya en su conjunto.

Julián Lazo Stegeman