P. Exequiel y Comunidad de Nuestra Señora de Pompeya
Ante el fallecimiento del Papa Francisco
“…Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder de la Muerte no prevalecerá contra ella”… (Mt 16,18)
Como sucesor de san Pedro y cabeza del colegio episcopal el Papa es el garante de la unidad de la Iglesia. Tiene la potestad pastoral suprema y es la autoridad máxima en las decisiones doctrinales y disciplinares.
La comunidad de Nuestra Señora de Pompeya agradece a Dios nuestro Padre por el don del Pontificado de nuestro querido Papa Francisco en todos estos años de tanta entrega y generosidad para con la Iglesia y el mundo.
Entre tantos gestos, acciones y enseñanzas que han manifestado la presencia, la cercanía de un Dios que sigue vivo y presente en medio nuestro, un Dios que como Padre no abandona a sus hijos; y el Papa - Padre ha sabido vivir esta misión en medio nuestro.
Continuamos invitando a rezar y agradecer por la vida de Francisco, su Pontificado, y el aporte realizado al magisterio de la Iglesia. Así también vamos abriendo el corazón y encomendamos a los Cardenales electores para que se dejen guiar por el Espíritu en la elección de un nuevo Papa.
Viene bien que recordemos que todos estos acontecimientos nos invitan a “mirarlos”, “contemplarlos”, “interpretarlos” desde un acto de fe en Cristo que ha fundado esta Iglesia y como dice el título de esta nota no dejará que el poder de la muerte, del mal prevalezca contra ella. Que podamos seguir viviendo este tiempo histórico que nos toca atravesar con la mirada entonces puesta en Dios: Padre, Hijo y Espíritu.
¡Gracias Papa Francisco!, y como siempre nos pediste: ¡Rezamos por vos! Con la certeza que él también intercede por nosotros…