2ª Entrega
Capacitación emocional...descubriendo oportunidades
Una editorial del Dr. Bernardo "Cacho" Gandini
En 1954 Jimmy Denny, manager del Grand Ole Opry, despidió a un cantante después de una audición. Jimmy le dijo: No llegarás nunca a nada hijo. Lo mejor que podrías hacer es volver a conducir un camión. Pero se convirtió en uno de los cantantes más populares y famosos de Estados Unidos y de todo el mundo: Elvis Presley.
Reconocer el talento es una clave para el éxito en el liderazgo. Dentro de las razones para no reconocerlo se hallan los errores de diagnóstico en las evaluaciones. Hoy sabemos que se explica dentro de los sesgos emocionales del cerebro, que son las equivocaciones o errores. En el caso de valorar a un cantante para representarlo, el error radica en la falta de empatía.
Sin dudas, Jimmy, con el tiempo debe haber aprendido sobre inteligencia emocional y apoyaría proyectos para enseñar inteligencia emocional en las escuelas. La misma es crear un espacio para que los chicos desarrollen esta inteligencia y de esa manera adelantarnos a problemas, sin esperar a que un chico intente suicidarse, tenga depresión, consuma drogas o caiga en la delincuencia, para recién intervenir. La desarrollamos a través de la educación emocional y es responsable del 80% del éxito que obtenemos en la vida.
La inteligencia emocional en un 99% puede ser aprendida. Lo que buscamos es desarrollar habilidades emocionales tempranas en las actuaciones, porque sabemos que en algún momento las van a necesitar. Lo que se está desarrollando hoy en las empresas es lo que se debería hacer en las escuelas. Hablamos de cinco macro habilidades:
-La primera es el auto-conocimiento, saber qué es lo que siento; esto parece simple pero no lo es, porque muchas personas confunden el hambre con la tristeza, el enojo con el miedo.
-Segunda la auto-regulación: Cuando estás enojado, tener la capacidad de sosegarte, calmarte y transitar una emoción dis-placentera, sea la que sea. Poder gestionarla y expresarla asertivamente. Es decir, cuidando al otro, cuidándote a vos mismo.
-Tercera es la auto-motivación que es conocer lo que te apasiona, lo que implica tener recursos para motivarte constantemente.
-Cuarta la empatía, que es saber qué sienten los demás.
-Y la quinta, las habilidades sociales, que hoy se consideran una inteligencia en sí misma.
Estas habilidades tienen que ver con la capacidad de darse a entender claramente, de resolver conflictos, de llegar al otro y comprenderlo, ayudarlo; eso tiene que ver con las habilidades emocionales. Estas cinco habilidades dan por resultado el coeficiente emocional, que si bien, todavía, no se puede medir, pero sí se puede desarrollar gracias al trabajo con la educación emocional.
La alfabetización emocional de docentes y alumnos evitaría conflictos en las evaluaciones, como la prevención de ciertas "patologías del poder" en algunos docentes y malos resultados en algunos alumnos estudiosos..
"Siempre que enseñes, enseña a la vez a dudar de lo que enseñas"José Ortega y Gasset