Capacitación emocional...descubriendo oportunidades

Cuando Alexander Graham Bell inventó el teléfono en el año 1876, no tenía su línea precisamente ocupada con llamadas y más llamadas de posibles inversores y patrocinadores. Tras una llamada de demostración ante el presidente de los Estados Unidos de América, Rutherford Hayes, éste le comentó: Este es un invento increíble, pero ¿quién querrá utilizarlo alguna vez? Este presidente no parecería, precisamente, una persona resiliente ni con niveles elevados de inteligencias múltiples...

Los atributos de las personas resilientes, se reconocen entre los siguientes:

-Autoconocimiento y autoestima: Significa saber cuáles son las principales fortalezas y habilidades, así como limitaciones y debilidades, permite trazar metas objetivas y realistas. Además, reconoce la importancia del trabajo en equipo, y saber pedir la ayuda necesaria. Permite mejorar la capacidad de reconocer y expresar las emociones, sobre todo en el sufrimiento. El conocimiento de sí mismo y de la realidad permite elaborar eficazmente los traumas y factores estresantes.

-Empatía es la capacidad de entender al otro y ponernos en su lugar, comprender sus sentimientos, a través de comprender los propios.

-Autonomía, es la creencia que uno puede influir en lo que sucede, perdiendo el temor a que suceden por injusticias ajenas a nuestro control.

-Afrontamiento de la adversidad con humor. Ser capaces de reírnos y hacer bromas con las situaciones, ayuda a superarlas con optimismo, a la incertidumbre. Ante las pérdidas, recuerdan a las personas en sus momentos divertidos, los ratos felices que pasaron o incluso recordar algo gracioso.

-Evitan la queja constante, viven el presente, sin que las culpas del ayer o la incertidumbre del futuro, lo enturbien; disfrutan de pequeños detalles y no pierden su capacidad de asombro ante la vida; se enfocan en aspectos positivos de cualquier situación, complicada o no. La conciencia del presente, puede resultar complicada con los ritmos actuales, se puede entrenar con el mindfulness (técnica de meditación).

-Flexibilidad y perseverancia: Un propósito significativo es lo que da sentido a la vida. Esta es la propuesta psicoterapéutica de Viktor Frankl, cuya vida es un ejemplo de resiliencia. El sentido en la vida da la fuerza interior para responsabilizarse de perseguirla, con flexibilidad y sin obstinación; también el abandonar la lucha cuando deja de tener sentido, y cambiar el rumbo sin frustración por abandono del objetivo inicial.

-Sociabilidad, es saber cultivar y valorar las amistades; se rodean de personas con actitud positiva ante la vida. Logran crear sólidas redes de apoyo, como sostenes en los momentos más difíciles.

-Tolerancia a la frustración y a la incertidumbre: Una de las principales fuentes de tensiones y estrés, es el deseo de controlar todos los aspectos de la vida porque se toleran mal las incertidumbres. Una forma para ganar seguridad es, precisamente, aprender a convivir con la incertidumbre para generar el menor malestar posible, adaptándose a las características de la vida actual.

"Los hombres sabios aprenden mucho de sus enemigos"Aristófanes