Caroline Högner: India, país de contrastes si los hay 2ª entrega
Hoy, después de pasar por muchas de las experiencias que vivieron durante la pandemia los gualeyos que residen en diferentes partes del mundo, retomamos el viaje a la India que realizara Caroline Högner junto a su esposo y sus hijas a fines del 2019 y comienzos de 2020.
En la última nota publicada se refirió a Nueva Delhi. Hoy nos hace visitar Varanasi, sitio sagrado para los hinduistas a orillas del rio Ganges entre los ríos Varana y Así.
Los hindúes creen que la muerte en la ciudad traerá la salvación (no tendrán reencarnación), por lo que es un importante centro de peregrinación.
La ciudad es conocida en todo el mundo por sus numerosos ghats (84) terraplenes hechos en escalones de losas a lo largo de la orilla del río donde los peregrinos realizan sus rituales. En el Manikarnika Ghat y el Harishchandra Ghat, los hindúes creman a sus muertos. Trabajan las 24 hs del día y para cremar cada cuerpo se necesitan aproximadamente 300 kg de leña. Tanto las cenizas producidas en estos crematorios como las traídas desde toda la India son tiradas al río por lo que en esta parte está bastante contaminado.
Hay tres personas que están exceptuadas de la cremación por considerarse puras: la mujer embarazada, los niños hasta 10 años y los monjes. A ellos se les ata una piedra y se los tira en otra parte del rio. ¡La verdad no sé con cual ritual me quedaría!!
Los baños en el río Ganges se consideran purificadores de los pecados. Según la tradición, todo hinduista debe visitarla al menos una vez en la vida, como el deber para los musulmanes de ir a la Meca.
Todas estas creencias han convertido la ciudad en el destino de enfermos y ancianos, que quieren pasar sus últimos días en la ciudad santa. A lo largo del Ganges se alinean numerosas residencias destinadas a albergar a los moribundos que sólo pueden permanecer por 10 días.
Para mí fue meterme en una película de ficción. Una experiencia única.
(continuará)