Ciudadanos locales fabrican barbijos para distribuir en el Hospital y Hogares de Ancianos.
Ante la pandemia que está azotando al mundo y en el marco de la declaración de emergencia sanitaria, acompañada por el decreto de cuarenta total, dictado por el Presidente Alberto Fernández, hay gente que se une por una misma causa: la de ayudar.
Muchas personas en Gualeguay, se abocaron a la tarea de la fabricación de barbijos, con el fin de ser distribuidos, de manera gratuita, en el Hospital San Antonio y en los distintos hogares donde residen nuestros adultos mayores (instituciones y hogares particulares).Desde el diario, estuvimos dialogando con Walter Testa, quien fue una de las tantas personas en nuestra ciudad, que dieron rienda a este proyecto. Y nos comentaba "Mirando en Facebook veo que Lorena González había subido la propuesta de hacer barbijos para donar a los abuelos, adultos mayores que son por ahí los que más lo necesitan. No dude, le mande un mensaje, me paso el molde, como había que hacerlos y ya está". Y prosigue, "lo publique en las redes sociales y apareció un montón de gente con ganas de colaborar y ofreciendo tela, hilos, elásticos"En la misma línea, agrega "Con Lorena decidimos destinarlos a hogares donde están los abuelitos, como así también llevar al hospital, para todo aquel que lo necesite. Me llegan mensajes al privado, de gente particular, que quiere comprar, pero nosotros no hacemos para vender, los hacemos para donar""Los realizamos en fiselina, con elástico, hilo de algodón, ese es el material que utilizamos. Es un trabajo que lleva bastante tiempo, porque entre que cortas, plegas, haces las tablitas, después pones las cintitas del costado, te lleva bastante tiempo, pero por suerte un grupo de amigas, también quisieron colaborar de alguna manera, no con insumos, pero si con mano de obra, entonces un grupo está cortando, otro plegando, me los hilvanan, los traen y yo los voy pasando por la máquina", responde Walter al ser consultado sobre los materiales con los que trabajaban y la gente que colaboraba.Con respecto a la distribución sostiene "vamos a fabricarlos hasta que se nos termine la fiselina. Y una vez que tengamos un determinado stock, procederemos a entregarlos en los hogares. La distribución la vamos a hacer en bolsitas cerradas, esterilizadas y personalmente"Esta iniciativa que comenzó hace una semana, se expandió rápidamente y muchas personas están imitando esta labor solidaria. Incluso, desde el taller de vestuario de la comparsa K´rumbay, se apoyó la causa de prevención y concientización, y se procedió a la confección de barbijos, los cuales serán destinados al nosocomio local. "Hay un montón de gente que se está acoplando a la idea y lo están haciendo de manera gratuita, que es lo que nos interesa, no queremos comercializar con esto, no queremos comercializar con la salud"Para finalizar, sostiene "entre todos nos tenemos que dar una mano, sobre todo en estos momentos tan difícil y no hay que alarmarse, hay que ser más humanos y más solidarios, no mirarnos tanto el ombligo sino mirar al que tenemos en frente. Son épocas que nos tienen que servir para reflexionar, no tiene que ser un castigo quedarnos encerrados en casa. En esta vida las cosas pasan por algo y esto nos tiene que dejar un aprendizaje a cada uno de nosotros"
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