El corso y la primera prueba
El avance de los casos de coronavirus y la implementación del Pase Sanitario de cara a la mayor fiesta de Gualeguay, el corso, nos pone frente a los debates que ya han comenzado a suscitarse, pero que recrudecerán en breve.
En Argentina los expertos calculan que la variante Ómicron, mucho más contagiosa, llegará dentro de unos meses, pero el aumento de casos en nuestro país por la variante Delta ya comenzó a hacer que las autoridades evalúen la posible adopción de medidas.
Recién comenzamos a ver los efectos de la tercera ola, pero el recrudecimiento de la pandemia, con el sostenido crecimiento de casos durante las últimas semanas, que en nuestra ciudad llegaron ayer a 30, plantea nuevos desafíos de cara a los próximos meses en un marco diferente a los anteriores, ya que actualmente las actividades se encuentra liberadas y queda poco margen para retroceder a fases anteriores.
Estas habilitaciones son las que permiten realizar hoy eventos masivos como el corso y las que instan también a las autoridades a implementar un Pase Sanitario con el principal fin de incentivar a la población que aún no se ha vacunado o solo cuenta con una dosis a completar ese esquema.
Desde el municipio de Gualeguay aguardan tener más precisiones sobre cómo se implementará ese Pase al que la provincia de Entre Ríos adhirió ayer y que comenzará a regir a partir del 3 de enero.
Al respecto, la Secretaria de Salud provincial, Carina Reh, adelantó que "cada jurisdicción" deberá revisar cómo implementarlo para el ingreso a espacios cerrados o abiertos de carácter masivo como boliches, recitales o eventos deportivos.
En ese sentido, la funcionaria dijo que trabajarán con "cada localidad para poder definir los eventos o lugares para exigir los pases sanitarios y generar la adherencia y control", y evaluó que definir la aplicación del mencionado pase y su posterior control será "una tarea bastante compleja y difícil"...Y ciertamente lo será.
En nuestra ciudad, esa primera prueba se daría en el Corso y cabe preguntarse al respecto cómo será controlado el ingreso al corsódromo, si se prevé la habilitación de nuevos accesos para evitar las aglomeraciones que inevitablemente se producirían por las demoras que implican la realización de los controles, si será o no necesario reforzar la presencia de efectivos policiales ante posibles incidentes derivados de la prohibición de ingreso de aquellos que no cuenten con el esquema completo de vacunación, entre muchos otros interrogantes.
Lo cierto es que, ante un esperado recrudecimiento de la pandemia, este tipo de medidas seguramente irán abarcando cada vez más actividades. Después de todo, cabe recordar que la resolución indica que desde el 3 de enero, toda persona a partir de los 13 años, que realice actividades definidas de alto riesgo epidemiológico y sanitario, deberá acreditar tener un esquema de vacunación completo contra COVID-19. Para ello, deberá exhibirlo ante el requerimiento del personal público o privado designado para su constatación.
Las actividades definidas para la acreditación del pase son la asistencia a locales bailables, discotecas o similares que se realicen en espacios cerrados, salones de fiestas para bailes, bailes o similares que se realicen en espacios cerrados, viajes grupales de egresadas y egresados, de estudiantes, jubiladas y jubilados o similares y eventos masivos organizados de más de mil personas que se realicen en espacios abiertos y cerrados o al aire libre.
Todos esos interrogantes y muchos otros esperan una respuesta, pero, de ser así, las polémicas y discusiones estarán a la orden del día. Lo sabremos en un par de semanas.
Rodrigo Cassella