Coro de Niños de París
Expresión musical de sublime belleza
La presencia en Gualeguay del Coro de Niños de París, perteneciente a la Maîtrise de Sainte Croix de Neuilly suscitó un increíble interés en nuestra zona.
Esto lo demuestra el lleno total que colmó las instalaciones de los dos escenarios en donde se desarrollaron los conciertos: Club Social el lunes pasado y Parroquia San Antonio el martes colmados como pocas veces hemos visto en un acontecimiento cultural en nuestra ciudad. Esta agrupación coral de gran prestigio ha recorrido el mundo con actuaciones en Europa y llegando hasta China en tres oportunidades. Es la primera vez que cruzan el Atlántico para una gira por América Latina, eligiendo Argentina y Uruguay en un largo recorrido con presentaciones en Buenos Aires, Mendoza, San Juan, Córdoba y en Entre Ríos, dos en Gualeguay y un concierto en Concepción del Uruguay. La gira finalizó ayer 28 pues hoy 29 regresan a Francia.
Dada la numerosa delegación fueron convocadas familias para recibir por tres noches a los 52 coreutas entre niños y jóvenes. La respuesta por parte de la gente fue de gran generosidad ya que dos o tres niños fueron recibidos en cada hogar. Es para destacar pues según nos cuentan sólo en Gualeguay los niños fueron alojados en hogares, lo que convierte este gesto en una nota singular. Sin esta generosidad característica de las familias gualeyas hubiera sido casi imposible albergar con confort a tantos niños y jóvenes.
El repertorio que escuchamos, en su mayoría de autores franceses, son obras difíciles de abordar, las que son logradas con maestría por el director FRANÇOIS POLGAR. El maestro Polgár con antecedentes de excelencia fue ganador del Premio Victoires de Musique, profesor de armonía en la Sorbona, fue director de coros de la Ópera de París, de los coros de Radio France y desde 1983 es Director del Coro de Niños que nos visitó esta semana.
Por su parte el pianista y organista Jean Christophe Polgár fue alumno del Maîtrise Sainte Croix y a partir de los 11 años coreuta del Coro de Niños. Hoy es el pianista del Coro de Niños de París, y organista del Gran Órgano de la Iglesia Notre Dame du Saint Sacrement, del Coro de la Ciudad Universitaria de París y del Coro del Ejército Francés.
Durante los dos conciertos pudimos apreciar obras de Couperin, Rameau, Fauré, César Franck, y una bellísima creación del maestro Polgár en una impecable estructura coral de una sonoridad y color musical exquisito. Disfrutamos de verdaderas obras de perfectas polifonías de una sonoridad y equilibrio que las convierte en verdaderas joyas musicales de belleza sublime, como el momento que percibimos en el templo de la Parroquia San Antonio en donde los coreutas comienzan a desplazarse cantando entre la gente por las distintas naves del templo logrando una resonancia que magnetiza y conmueve. Son chicos y jóvenes que cantan produciendo vibraciones sonoras en brillante polifonía, momento mágico que perdurará en nuestro recuerdo. Y si hablamos de emoción es la que nos embargó a todos cuando comenzamos a escuchar los compases del “Te quiero”, poema de Mario Benedetti, con música de Alberto Favero, una de las obras de mayor repercusión que permanece en el alma de la gente. Cantada por los niños franceses en castellano fue realmente conmovedor.
Quienes compartimos la responsabilidad de estas presentaciones nos sentimos totalmente felices pues logramos recibir dignamente, como se merecen a estos pequeños artistas de prestigio que llegaron para regalarnos su arte incondicionalmente, su expresión musical de sublime belleza. Nosotros a cambio les ofrecimos nuestra emoción. Creo que el objetivo fue logrado.
Zélika Alarcón de Tamaño