Luciano Flores, de profesión afilador

Entrevistamos a un trabajador ambulante, de un oficio tan noble como antiguo pero que justamente en la actualidad escasea: el afilador.

Luciano Flores se dedica hace unos 8 años a la tarea de afilar cuchillos, tijeras, palas, entre otros tantos elementos o herramientas. Él se gana el pan con esta digna actividad laboral y de la cual por cierto cuenta con una importante clientela.

Flores nos cuenta que “se afilan tijeras, cuchillas, serruchos, palas, hachas, las cuchillas de los corta pasto, es decir, todo tipo de elementos de corte. También fabrico cuchillas de disco de arado, que por suerte tengo muy buenas ventas. Por otra parte, quienes se dedican a la gastronomía los visito cada 20 o 25 días para afiliar sus cuchillas. Y también por el asunto de la poda también me piden que les afile hachitas, serruchos, por lo tanto, tengo bastante demanda de trabajo”.

Luciano asegura que, en Gualeguay, al menos, casi no hay afiladores. “Cuando yo empecé en esta actividad laboral, hace 8 años, se veían algunos, pero ahora no se ven. Este oficio es mi medio de vida. Teniendo en cuenta que la construcción está parada, me dedico a afilar”.

Acerca del medio de contacto con Flores, él nos comentó: “Vivo en continuación Antártida Argentina, a dos cuadras y media de avenida Presidente Perón, frente a Maxi Kiosco “El Pela”. Mi número de teléfono celular es 3444-442154”.

El afilador también expresó: “agradezco a El Debate Pregón por la nota. También estoy muy agradecido a la gente que me convoca para esta tarea de afilar. Es mucha la gente solidaria”.

Consultado sobre el funcionamiento de la bicicleta con los elementos de trabajo, Luciano Flores, describió: “está armada de otra yanta más pequeña, paralela a la rueda trasera y el ‘muñeco’, que se compra, y la piedra para afilar. También, a un costado de ésta, funciona otro elemento (similar a la piedra) que sirve para asentar; está recubierta de una cinta que afila y limpia y con eso queda más prolijo la pieza trabajada”.