Huellas, por Carlos Campodónico
Marcos Pereyra, Huella de nuestra música del litoral
En Victoria se nace con guitarra se solía decir. Y no escapa a esa condición este artista que, además de su excelente condición vocal, es compositor y productor musical.
Marcos Pereyra nació en Victoria el 23 de marzo de 1987 y comienzó a estudiar guitarra de la mano de su padre, quien será el encargado de enseñarle los primeros pasos en las cuerdas y de transmitirle la pasión por el instrumento. A los seis años sube por primera vez a un escenario y, allí, se inicia un camino musical que no se detendría y en el que va dejando su huella musical con un mensaje claro y auténtico. Por entonces tuvo su primer conjunto que se llamó Las Guitarras Chamameceras, formado en 1993, y con doce años graba su primer trabajo discográfico “Nacer entrerriano”, emocionando con su forma tan particular de interpretar cada obra que, por su corta edad, ya iba definiendo una línea hacia el folklore y, principalmente, hacia la música del litoral.
Con el paso del tiempo y con varios premios y menciones en su haber, da comienzo a su carrera como solista. En 2004, graba su segundo disco titulado “Nostalgia”. Por entonces, ensambla su camino musical con el bandoneonista Franco Giaquinto y juntos grabaron dos discos: “A mi gente” y “Huellas”. Tanto Marcos como Franco, son dos de los grandes referentes que tiene nuestra provincia en lo que hace a la música litoraleña. Sus obras son escuchadas y difundidas en el territorio provinciano y en todo el país. Ese trayecto musical les ha valido también su llegada a otros lugares como Brasil y México, adonde han llevado su música y han dejado a Entre Ríos y a su cancionero en lo más alto de los escenarios.
En 2018, viaja junto a Rubén Giménez a Estados Unidos en una gira que llevaría obras musicales de la provincia y de la región, logrando una gran aceptación y una gran repercusión en ese país. En 2019 integra junto a otros renombrados artistas, la delegación de Entre Ríos que se presenta con brillante actuación en el escenario mayor Atahualpa Yupanqui del Festival de Cosquín y que, posteriormente, continuara en gira por otros escenarios del país.
En la actualidad, ya afianzado en su carrera como solista, Marcos Pereyra es nominado a los Premios Gardel como Mejor Álbum de Chamamé, por su último trabajo discográfico “Canciones”. Por otra parte, paralelamente, lleva un excelente camino como productor y, en este sentido, cabe destacar la producción del disco del recordado Octavio Osuna, con quien entabló una entrañable amistad y recorrió innumerables escenarios. Un valioso recuerdo y distinción en su carrera por ser Octavio uno de los grandes nombres del cancionero litoral.
Los reconocimientos recibidos a través de premios y galardones además de la consagración de todos los públicos ante quienes se presenta, son nada más que el merecimiento a su trabajo constante y consecuente. Un merecimiento a la humildad y al amor con que abraza no sólo su instrumento, sino también la música del litoral.
Marcos Pereyra, un valor joven que deja su huella, es pilar y ejemplo a seguir del canto de nuestra música del litoral.