Paisaje
Nuestro paisaje y sus contrastes
Artículo enviado por la presidenta del Rotary Club Gualeguay, la señora Cristina Arias.
Días atrás tuve la enorme alegría de poder dar un paseo en una piragua con motor, una embarcación chica, algunas horas, siempre cerca de la ciudad.
Me quedé con dos sensaciones muy muy distintas...; por una parte, maravillada, porque nunca había salido así, a conocer un poco más, y sentir una emoción enorme por la belleza natural que tenemos acá nomás, y que es nuestra, en el sentido de decir está en Gualeguay, tan próxima a nosotros. Cigüeñas, teros reales, garzas, biguás, y tantos otros ejemplares, ¡hasta una tortuga vimos!
Sin embargo, la tristeza me embargó, porque si bien se ve gente que quiere y quiere que se quiera y cuide nuestro río..., vivimos a su espalda. La proximidad de la ciudad, los colores de donde terminan y desagotan efluentes del frigorífico, con una coloración tan diferente a las aguas del río... La cantidad de mallones, aún con una bajante terrible...con los pocos peces que hay..., areneras que hieren socavando nuestras costas y lecho...
¡La suciedad en tantos sitios...! Un ex balneario municipal, que es un homenaje al abandono, con sus escalinatas casi destruidas... El puente histórico roto y los cientos de palos flotando, con el peligro que conlleva para quien navega. Se están sacando, sí, pero creo que no debió llegarse a ese estado de situación… Los restos de ranchos, olvidados y saqueados. No debemos olvidar a los que les gusta hacer turismo en contacto directo con la naturaleza y que no encuentran camping en condiciones cerca de la ciudad, más allá de los que ofrecen privados.
Ante tanta belleza natural y destrucción y descuido del hombre: estamos a tiempo... El agua es fuente de vida. Cuidemos nuestro río, nuestro paisaje. El daño puede ser irreversible... Vecinos, políticos y empresarios…, cuidemos nuestro río, nuestro maravilloso paisaje. Puede ser también una fuente de ingresos sin destrucción...
La poesía sobre el río no será la misma cuando lloren los sauces por lo que hemos hecho, al no dejar ser a la naturaleza..., al descuidar el paisaje que merecemos disfrutar en todo su esplendor y compartirlo con los visitantes.
¡Ojalá reaccionemos pronto, ya, antes que sea demasiado tarde y nos invadan la destrucción y los desechos!
Cristina Arias