PACHAMAMA, VEN
"Pachamama salta a tierra Pachamama / Es este mundo que va cambiando la globalización / Se ven los cerros y los bosques por la televisión / Es el cemento sobre el barro la contaminación / Pachamama santa tierra Pachamama / Pachamama ven ven" *
Ven desde tu ancestral origen incaico, diosa de la naturaleza, del sustento, de la semilla que crece desde los áridos suelos hasta en las cercanías del agua, protectora de la tierra y la agricultura, que alimenta a tus hijos. Has recorrido el camino de los Incas hasta enclavar tu presencia en este suelo argentino, aquí, en el noroeste, entre cerros y valles. Mama, Madre con tu generoso abrazo a la Pacha, Tierra-Universo, has trascendido al tiempo para enraizarte en los pueblos que hoy te siguen venerando o, simplemente, recordando tu día como un grito, de salvataje protector, ante el ultraje de tu ser, de tus bienes, de tu fertilidad.
"Pachamama, somos los hijos de los hijos que venimos del sol / Que agradecemos y traemos esta chicha de hoy / Eras la madre cuna tierra, me arrodillo ante vos"
En la víspera a su día, hemos comenzado la preparación de los alimentos en olla de barro con papas, maíz, la Tijtincha, la kalapurca, la chicha (que además compartiremos en la ceremonia). La boca de la tierra ya está abierta y se completa la vigilia acercándonos al pozo, llevando nuestros trajes y adornos típicos y nuestros cordones blancos y negros atados al cuello, a las manos y a los tobillos. Allí esperamos a que despunten los primeros rayos del sol. Distinta familias y grupos, en cerros y valles, dan comienzo a la challa que es la ceremonia de reciprocidad entre las personas y la Madre Tierra. Antes que nada se debe sentir una comunión entre la Pachamama y las ofrendas que se le otorgan: devuelvo con gratitud lo que la Madre Tierra me ha brindado y pido por su protección para la fertilidad y el alimento.
El sol nos ilumina y la challa comienza (que se extenderá durante todo el mes de agosto), en ese pozo-boca de la tierra, colocamos la olla de barro con el alimento más hojas de coca, cigarrillo y chicha. En un pequeño altar se han colocado varios comestibles que se queman, por ejemplo, con palo santo y luego, aún humeantes, se derraman sobre la anterior ofrenda. Durante ese día la ceremonia continuará con oraciones, cánticos y bailes. Cada familia, cada grupo, hará la ofrenda de acuerdo a sus posibilidades, podemos ver en lugares cercanos challas más coloridas, lujosas y concurridas, otras mucho más sencillas pero no importa la calidad ni la cantidad, la Madre Tierra lo recibe agradecida y gustosa.
Siento y sentimos que debemos aclarar que en esta celebración entregamos desde lo más profundo de nuestro ser el agradecimiento y el pedido a la Pachamama para volvernos una misma esencia, para reconstruirnos como hijos y ella como madre protectora de nuestra subsistencia y, así, lo compartimos con todos los que, de esa manera, lo sientan. Es nuestra tierra, nuestro hogar, nuestra vida durante todo el año. No es un espectáculo turístico ni festejos viscerales.
"Pachamama / Serán los seres bienvenidos a la celebración / No importa donde hayas nacido, no importa tu dolor / Que lo que importa es el respeto no tanto la razón / Deja, deja, deja que hable tu corazón."
* Los Tekis, "Pachamama, Ven, Ven"
Prof. Alicia Hauscarriague