Gualeyos por el Mundo
Para compartir ricas experiencias Carolina Recalde: Indonesia 2ª Parte
En esta entrega, Carolina Recalde retoma su fantástica experiencia en Indonesia, Asia. Continúa describiendo y rememorando momentos únicos en un paisaje paradisíaco.
“Después de recorrer Bali, nos fuimos a Nusa Penida, que es una isla que está enfrente. La isla nos encantó, nos animamos a alquilar moto y salir por nuestra cuenta. Es por lejos menos caótica que Ubud y sus playas se encuentran lejos una de la otra por lo que es necesario éste medio de transporte.
Manejando la moto nos fue bárbaro; seguimos probando la comida típica que en general es bastante picante y sus deliciosas frutas.
En Nusa bajamos un sin fin de escaleras para llegar a una de sus playas más paradisíacas y celestes, Kelingking Beach. Desde arriba vimos mantarayas. María incluso se animó a hacer buceo y le encantó.
Después de Nusa, fuimos a nuestra última parada en Indonesia, las islas Gili. Son 3 islas, Gilí Trawangan, Gilí Meno y Gilí Air. Hicimos parada en ésta última; la gente local es muy hospitalaria y es más bien un pueblo, sin calles asfaltadas, se usa la bicicleta, moto o carretas tiradas por caballos como medio de transporte, además de las pequeñas y grandes embarcaciones.
Hicimos un día de snorkel y visitamos Gilí Meno; vimos muchas tortugas marinas, peces de todos colores, corales e incluso un tiburón.
En nuestra última noche decidimos irnos a conocer Gilí Trawangan, que es más bien el lugar elegido para ir de baile por sus fiestas en la playa. A diferencia de las otras dos Gilí, ésta está asfaltada y tiene incluso marcas como McDonald's, no sólo comida local.
El regreso de las Gilí a Bali para tomarnos el vuelo a nuestro próximo destino, Tailandia, fue un poco desesperante. El barco era grande, con aire, pero viejo. Cuando llegamos a mar abierto las olas eran muy grandes y el viento soplaba fuerte, por lo que nos jugó una mala pasada y nos asustó. Afortunadamente, llegamos nerviosas, pero bien para continuar nuestro viaje.
Queremos agradecer a otros dos gualeyos, Manuela Jajan y Alejo Carbone, que nos brindaron ayuda, recomendaciones y buena onda para armar nuestro itinerario de viaje. Indonesia es una locura, que vale la pena”.