Pirotecnia en nuestra ciudad: necesitamos compromiso político y social para finalizar su uso
Llegan las fiestas y los eventos de fin de año, con esto aparece una práctica tan desdeñable como naturalizada, el uso de pirotecnia.
Si bien existen variadas leyes y decretos a nivel nacional, provincial y local que regulan e, inclusive, prohíben su uso, la falta de compromiso político y social hace que los vecinos de Gualeguay observemos y escuchemos en casi todas las festividades y eventos el despliegue nocivo de estas prácticas y consumos.
En 2017 se conoció un decreto municipal en nuestra ciudad que prohibía el uso de pirotecnia, el mismo comenzaba de la siguiente manera: "Limítese el uso, distribución, almacenamiento y comercialización de artículos de pirotecnia y todo producto que genere: ruido mediante detonaciones que exceda 90 decibeles y globos aerostáticos con fuego. El USO INDISCRIMINADO de pirotecnia en celebraciones o acontecimientos diversos que genera ruidos por detonaciones, provocando alteraciones en el sistema auditivo, malestares psico-físico de numerosos seres humanos y variadas especies de animales, causando enfermedades e incluso hasta la muerte; abre la necesidad de desalentar y poner límites al uso, distribución, almacenamiento y comercialización a la pirotecnia sonora y globos aerostáticos con fuego, de acuerdo a lo reglado por Ley nacional 20.429, y su Decreto reglamentario N°302 año 1983 y Ley 10.282, de la Provincia de Entre Ríos promulgada en el año 2014". Asimismo, durante la primera sesión de prórroga en el año 2020, la Cámara de Senadores de nuestra provincia convirtió en ley la iniciativa que tiene por objetivo regular de manera íntegra el uso de la pirotecnia (Fuente: Senado de Entre Ríos). A su vez, en enero del presente año, el Ejecutivo Provincial promulgó la ley que regula el uso de la pirotécnica en Entre Ríos y prohíbe la comercialización y expendio de cualquier elemento que no haya sido calificado como de "venta libre" (Fuente: El Debate Pregón).
Como se puede observar en las líneas anteriores, las normativas vigentes para regular y detener el uso de la pirotecnia son varias y diversas. En este sentido, queda claro que lo que faltan son dos cuestiones. Por un lado, el compromiso político para ir firmemente en contra del uso comercial de estos explosivos. Por otra parte, motorizar políticas públicas que eduquen y concienticen acerca de las consecuencias del uso de la pirotecnia. De esta manera, finalizar con la ignorancia que explica en gran parte su consumo. Es decir, entonces, que no sólo es importante la responsabilidad política, sino también la responsabilidad social de la ciudadanía.
En fin, las leyes y decretos ya existen, lo que se requiere ahora para terminar con este flagelo tan naturalizado es el compromiso político y social tanto se los administradores del Estado como de la sociedad civil en general.
Julián Lazo Stegeman