Prevención de adicciones: El testimonio de los jóvenes
En el marco de la realización el próximo viernes 2 de agosto de una charla sobre prevención y Concientización de adicciones a cargo del director de la Fundación “Aprender a Vivir” de Concepción del Uruguay, Facundo Brunt, dialogamos con tres jóvenes con problemas de adicción en recuperación que realizan su tratamiento en dicha fundación. Mantenemos en reserva los nombres de dichos jóvenes centrándonos en su valioso testimonio. A continuación, compartimos dos de ellos.
En primer lugar, dicho joven comentó: "A una temprana edad, con problemas que tenía, se dio la casualidad de que un día, creo que involuntariamente, probé la droga por primera vez. Siete años más o menos habré tenido. Como era tan chico no sabía qué es lo que estaba haciendo, sí escuchaba por otras personas, pero no entendía bien de qué se trataba"."Pasaba el tiempo y cada vez lo notaba más en mí, veía la desesperación de mi familia, más que nada. Si quería hubiera podido pasar una infancia como quería, pero por diferentes cuestiones fui eligiendo otro camino, que quería conocer otra gente sinceramente, me sentía grande consumiendo, cuando realmente tenía 8 o 9 años. Así fue pasando el tiempo y a los 10 años ya empecé a consumir cocaína, marihuana. Después, a los 12 o 13 años, terminé detenido por robo y ahí empecé a tocar fondo", agregó.Por otra parte, expresó: "Mi consumo comenzó involuntariamente y terminó voluntario a lo último, porque llegó una etapa en mi vida en que yo quería seguir en eso, no quería dejar de consumir, pero cuando fue pasando el tiempo vi que ya era violento con una parte de mi familia y en la calle, ahí me di cuenta de que sí tenía que pedir ayuda"."Llega una parte en que los chicos, por ejemplo, como me pasó a mí, pensamos que consumiendo somos más grandes o que nadie nos va a decir nada, muchos creen que nos van a tener más respeto, en fin, por un montón de cosas, tal vez hasta por buscar un afecto en otra persona terminamos haciéndolo, muchas veces pasa eso", indicó.En tanto, recordó: "Yo no quería estar con mi madre y cuando me acerqué más de a poco le iba comentando lo que me estaba pasando, confiando en ella, porque en realidad yo no confiaba en nadie, a veces me peleaba con mis hermanas y las trataba mal, pero con mi mamá empecé a encontrar el afecto que quería tener. Comencé a confiar en ella, ya veía que no podía salir de ese pozo, se me hacía imposible a mí solo salir. Estando con ella, nueve meses antes de internarme, me había calmado un poco, pero seguía tocando fondo y a veces pasaban cosas que no sabía cómo resolverla y estaba ella para ayudarme. Llegó un momento que le dije de internarme porque yo ya no daba más. Me interné, hoy ya hace un año y un día que estoy internado y la verdad que para mí es un montón porque hemos pasado tantas cosas dentro de la internación, buenas, tristes, de todas de momentos compartidos con compañeros, familias, pero agradezco haber llegado a esa Fundación porque fue lo que me sacó adelante, hoy en día gracias a eso me estoy sintiendo bien. Lo que más me queda de eso es la contención que te dan en esa Fundación, tus propios compañeros, porque empecé a ver adentro de la internación que no se necesita ni alcohol ni las otras drogas para pasarla bien ni para tener personas que te ayuden".En tanto, otro de los jóvenes expresó: "Yo particularmente, para poder decirle a alguien algo cuando estaba en consumo siempre me acercaba con alcohol o drogas porque pensaba que esa persona no me iba a hablar. Adentro empecé a reconocer muchas cosas. Las personas la verdad tienen un corazón enorme y me ayudaron a estar bien hoy y poder estar hablando acá. Creo que si seguía así como venía no iba a llegar a estar como estoy hoy. Hoy cuento con muchos compañeros, tanto los que están afuera como adentro", añadió.Asimismo, indico: "El que ya la está pensando en probar lo va a hacer. Tal vez otras personas que ya lo pasaron nos dicen, pero igualmente queremos hacerlo para saber qué se siente. Lo único que puedo decir que el que está por probarla que trate de no hacerlo, porque no digo que la internación es linda, tampoco que es malo, pero yo por querer hacerlo terminé internado, muchas veces lejos de mi familia y me preguntaba por qué me tenía que pasar esto. Perdés todo, eso no te lleva a ganar nada, las primeras veces, lo único que te lleva a `ganar´ es grandiosidad, te sube el ego con las otras personas nada más, pero si piensan que con eso van a ganar algo están totalmente equivocados, realmente, lo único que hacen es perder lo que tienen y perderse uno mismo". "A los jóvenes de mi edad decirles que yo al principio, cuando consumí por primera vez lo hice por curiosidad. Mi familia me hablaba mucho sobre eso, que no la probara nunca, que era algo que no podía salir, siempre me advirtieron, pero con 13 años yo pensaba que eso era mentira, y probé a ver si era tan real como decían que no podías salir. Recuerdo que consumí por primera vez y habrá pasado un mes que no lo hice más. Al otro mes de nuevo, y pensé que era mentira lo que decía la gente grande. Lo que pasa es que como es una enfermedad progresiva, a mí me agarró en el momento menos esperado, cuando menos acordé de los 13 años pasaron a los 17 años y de un momento a otro ya no podía controlarla más", finalizo.
ESTE CONTENIDO COMPLETO ES SOLO PARA SUSCRIPTORES
ACCEDÉ A ÉSTE Y A TODOS LOS CONTENIDOS EXCLUSIVOSSuscribite y empezá a disfrutar de todos los beneficios