Sergio Caffarena: El artista plástico que siempre retorna a su ciudad

Vino a disfrutar de sus vacaciones mientras pintaba un mural que ya finalizó y que se encuentra junto a otros en una de las paredes del corralón municipal.

S.C.: -Vine de vacaciones como todos los años y aproveché para trabajar en la parte artística y pude concretar un mural. La Municipalidad había convocado, con un concurso, para hacer una pintura alusiva a todas las provincias del país. Así, me propusieron hacer la de Río Negro, donde resido desde hace mucho tiempo, comienza expresando, para proseguir:- Hice un pequeño boceto; quería representar los distintos aspectos de la provincia desde lo productivo y desde el paisaje como el mar, la cordillera, la barda, la estepa, el petróleo…

Con respecto a la obra, comenta: -La pintura tiene una parte de cordillera, de lagos, de nieve; del Puerto de San Antonio Oeste, importante por la pesca; también tiene el balneario de Las Grutas. Hay otro aspecto característico fundamental: las chacras con la producción de peras y manzanas; la confluencia de los ríos, la barda, que es un tipo específico de montaña. Además, está la producción de petróleo. Este mural me ha llevado una semana y media, con un trabajo de entre tres y cinco horas por día. Me ayudó mi hermano Gustavo, a quien le gusta mucho trabajar en pintura; también Carmín, mi hija.

Más adelante conversamos de su actividad en Río Negro: -Sigo con mi taller de pintura; pero me dedico mucho más a la producción artística; desde el año pasado, dedico la mitad del mes a las clases y la otra mitad, a producir. Realizo encargos de empresas; por ejemplo, para edificios u oficinas; siempre dentro de mi estilo, que tenga mi impronta, no cualquier tipo de trabajo; esto es algo que he ido respetando; por suerte, es una imagen que gusta y están saliendo más tareas de ésas.

-En cuanto a los intereses de mis alumnos, son variados. Algunos toman las clases desde un aspecto terapéutico, para relajarse; otros van con intenciones más artísticas, algunos ya han realizado sus propias exposiciones; otros van para trabajar con la técnica de espátula y óleo porque no hay mucha gente allá que haga eso. También doy clases de acuarelas, aunque son grupos aparte, ya que hay materiales que no son compatibles con otros en una misma clase. En cuanto a la acuarela, ahora tiene un nuevo auge por el tema de la llamada “pintura botánica” (flores, hojas…), ya que sirve muy bien para esa temática. No creo que la acuarela haya perdido vigencia; sí pasa que es una técnica más complicada, más difícil dado que depende no sólo de la habilidad de quien la haga, sino también de la calidad de los materiales empleados. Por ejemplo, el papel tiene que ser de cierto gramaje, muy absorbente, que no se doble cuando se le pone cierta cantidad de agua; es un papel con características muy especiales. 

Con respecto a su estilo, nos dice: -Mi impronta se basa sobre el colorido; trabajo mucho con personajes, paisajes, pinturas figurativas… Hago algunos trabajos abstractos, pero siempre con mi estilo; no son copias. Pinto mucho abstracto, aunque no es lo que más hago; en mi taller hay muchos alumnos que trabajan con abstracto. En la última muestra grande en que participé, expuse obras figurativas y abstractas. Sigo trabajando con dimensiones grandes, un metro y medio por un metro o un metro treinta por noventa; son las medidas acostumbradas, aunque puede haber alguno más grande o más chico. El mural de acá tiene casi cinco metros por tres metros: es grande. Hay posibilidades de hacer otro; me gustaría hacer el de Neuquén además, si hubiera posibilidades.

Hacia el final comenta sobre proyectos de muestras: -Arranco este año con una serie de muestras en un complejo de Cipolletti, en el que ya expuse. También expondría en Neuquén. Además, podría darse una muestra itinerante acá, en Entre Ríos; en Gualeguay, primero y luego llevarla a tres o cuatro ciudades más de la provincia. Será un año intenso en exposiciones, luego de la “frenada” de la pandemia.