Una sala colmada ovacionó a “Héroe”

Desde su aparición en el escenario cantando una selección, sin prólogos de presentación, hasta el final después de casi 2 horas de actuación, cautivaron al público que no dejó de aplaudir cada entrega y participar en muchos  momentos, increscendo  el entusiasmo a medida en que se desarrollaba el espectáculo.

El trío abordó diferentes géneros, incluso realizó mixtura de ellos. Fue un espectáculo musical muy dinámico, con la utilización de la tecnología perfectamente sincronizada, especialmente cuando los cantantes articulaban las letras de las canciones exactamente como se reflejaba en la proyección. Las imágenes proyectadas que acompañaban a cada canción eran bellísimas, sobre todo de Italia, lo que le imprimió un efecto atractivo y un plus al espectáculo. La interacción con el público es un recurso que siempre produce cercanía y empatía y en este caso recibieron la respuesta de toda la sala, más aún cuando  descendieron del escenario y compartieron el micrófono con los espectadores.

En un momento la banda dejó de tocar, se reunieron los tres cantantes alrededor de un piano que ejecutó con solvencia uno de ellos, Federico Picone, y ofrecieron varios fragmentos de canciones. Esas interpretaciones permitieron apreciar con mayor nitidez, las voces y los timbres.

La incorporación de mensajes de paz, solidaridad y empatía formaron parte de su presentación. Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando compartieron recuerdos de su viaje a las Islas Malvinas, comentarios apoyados por fragmentos de sus tres videoclips grabados allí. Uno de esos temas fue cantado como homenaje esa noche a los Héroes del Malvinas; interpretaron “Unidos por la paz” que fue dedicada a los dos ex combatientes presentes en la sala, Javier Paredes de nuestra ciudad y Pedro Galván, de General Galarza. Para ese tema incorporaron la voz de León Gieco en perfecta armonía con el trío. Al finalizar la interpretación, solicitaron que los excombatientes se pusieran de pie y un aplauso enérgico y sostenido cubrió la sala. 

Pasado ese momento emocionante volvieron a su repertorio con la comicidad incorporada en un ensamble perfecto de voces y humor. 

Entre las múltiples obras que entregaron podemos mencionar, casi sobre el final de la actuación, “O sole mío”, “Funículí Funícula”, el Brindis de la “Traviata”, clásicos italianos que tuvieron atractivos y didácticos soportes en video.

Al finalizar el espectáculo el público en su totalidad los aplaudió de pie solicitando un bis que entonaron junto con los espectadores

Fue una noche maravillosa, con jerarquía artística, con mucho humor y emoción.

¡Felicitaciones a la Comisión del Teatro Italia por este acierto que fue del gusto de todos!

Graciela Saavedra