Unas 3.000 personas concurren cada sábado a la Feria de la Estación

La cantidad de clientes crece a diario al igual que el número de feriantes, que habitualmente suelen alcanzar los setecientos. Por cierto, debido a la gran demanda de vendedores, el predio, que está ubicado en ex la estación de ferrocarril, se ha extendido y mejorado.

Dialogamos con la coordinadora de la Feria de la Estación, María Otero, quien nos comentó sobre las innovaciones que se han realizado en el lugar, entre otros asuntos. En este sentido, manifestó: “venimos trabajando, tratando de mejorar la feria. Habitualmente los días sábados concurren unos 600 feriantes. Los precios han aumentado. Igualmente, teniendo en cuenta que es una feria hay distintos tipos de precios.

Desde hace unos meses se ha incrementado la cantidad de feriantes y tratamos de acomodarlos y respetar la organización que estamos haciendo para que todos puedan vender y que el público nos siga acompañando”.

En relación a las obras que se llevaron a cabo en el predio, indicó: “Tuvimos que incorporar nuevos bancos porque se han destrozado unas trescientas sillas. Hemos averiguado precios de sillas plásticas y, por ejemplo, cien unidades cuestan alrededor de dos millones de pesos. Entonces, optamos por realizar banquillas tablones que se quitaron de las tribunas del Corsódromo y tienen capacidad para cuatro feriantes”.

 “Los horarios de la feria están comprendidos entre las 14:00 y las 17:30”, agregó. “Los feriantes se acercan al predio ya a las 8 de la mañana y hacen cola hasta que se abre al público. Vamos manteniendo el orden al tiempo que también lo vamos mejorando cada día porque siempre se suma gente nueva a la feria y no conoce como es la organización. Después a las 2 de la tarde, abrimos el portón, los feriantes se van acomodando en su mayoría en los puestos y otros a la parte del césped. Por ahí, algunos, no entienden que tiene que haber lugar para todos. Cada feriante tiene que respetar el reglamento y acomodarse porque tiene que haber lugar para todos”, puntualizó por último, María Otero.