Jornada por el "Día de la Mujer":
“La problemática de género no debe ser subestimada”, afirmó Pablo Guercovich
La Asociación de la Magistratura de Entre Ríos organiza en Gualeguay una jornada por el “Mes de la Mujer”. El juez de Familia de Gualeguay Pablo Guercovich se refirió al encuentro que tendrá lugar en Bomberos el próximo viernes 8 de marzo, en el salón de Bomberos Voluntarios Gualeguay. El acceso es libre y gratuito.
“En el marco del Mes de la Mujer, la Asociación de la Magistratura y la Función Judicial de Entre Ríos organiza en Gualeguay una Jornada abierta a toda la comunidad, con entrada libre y gratuita, en la que reconocidos panelistas de toda la provincia disertarán sobre violencia contra la mujer e identidad de género. La actividad, que tiene en trámite la declaración de interés educativo de la Dirección Departamental de Escuelas, se realizará el próximo 8 de marzo en el salón de Bomberos Voluntarios de 16 a 20.
“La problemática de género no debe ser subestimada” afirmó a este diario el juez de Familia y Penal de Niños, Niñas y Adolescentes de Gualeguay, Pablo Guercovich, que organizó la actividad. “Las Naciones Unidas vienen alertando desde hace decenas de años acerca de las desigualdades de género y exigiendo a los Estados que adopten políticas activas para reducirlas. La Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación de las Mujeres data de 1979 y ahí se reconoce que la desigualdad de género se funda en patrones socioculturales, fundamentalmente en estereotipos que ubican, por ejemplo, a la mujer en funciones de cuidado y al hombre como proveedor. Hemos sido sociabilizados en base a ellos y por eso la desigualdad de género todavía cala hondo a nivel estructural”, dice el magistrado.
-¿Por ejemplo?
- Bueno, a lo largo y ancho del territorio las mujeres tienen más dificultades que los hombres para alcanzar mayores grados de autonomía económica y están expuestas a una sobrecarga de trabajo no remunerado. Esto ocurre incluso en las provincias más ricas porque la posibilidad de aprovechar las mejores oportunidades depende en gran medida de la mayor cantidad de tiempo que las mujeres todavía dedican a las tareas de cuidado. Así se explica que las mujeres ganen en promedio un 28 % menos que los varones, que la tasa de desocupación de las mujeres sea casi 2% mayor al de los hombres y que las mujeres estén más expuestas a trabajos informales que vulneran sus derechos laborales. También se da un fenómeno que se llama feminización del trabajo. Justamente por eso del estereotipo del cuidado, el empleo doméstico es realizado en su totalidad por las mujeres. Casualmente es uno de los trabajos que se consideran de bajos ingresos. Los trabajos de ingresos medios, en cambio, son realizados mayormente por hombres. ¿Quiénes tienen más posibilidades de ahorrar? La mayor autonomía económica de los hombres no tiene discusión.
-¿Cómo se llegó a esto?
- Es consecuencia de patrones socioculturales de los que es muy difícil desprenderse. Hemos sido sociabilizados en base a ellos. Recordemos que en las películas de Olmedo y Porcel se festejaban algunas acciones contra las mujeres que hoy no dudaríamos en calificar de abuso sexual. La mujer era ubicada en un lugar de objeto. Pero además la sociedad ha asignado históricamente a las mujeres y a los hombres determinados roles basados en supuestas características, como que la mujer es sensible y el hombre rudo. De ahí que todavía ahora un hombre sensible aparece como débil, y una mujer decidida y luchadora suele pasar por loquita. Por eso las Naciones Unidas vienen insistiendo con la necesidad de que los Estados modifiquen los patrones socioculturales de conducta de hombres y mujeres con miras a alcanzar la eliminación de los prejuicios y las prácticas que se basen en funciones estereotipadas de hombres y mujeres.
-¿Qué es exactamente la perspectiva de género?
-Nada más que un modo de ver para actuar. Es absurdo oponerse o prohibirla. Si uno reconoce la desigualdad estructural, si uno reconoce la existencia de esos estereotipos de los que hablamos antes, entonces observa y entiende el contexto de género en el que se da una situación concreta. Para poner un ejemplo grosero, pero que suele darse. Un hombre sin trabajo o sin ingresos puede sentir una frustración exorbitante en relación a su mujer como consecuencia del mandato social del que hablamos. Si ella es independiente y exitosa más aún. Ahí está latente la posibilidad de la violencia. Sin perspectiva de género, no advertiríamos el trasfondo y quizá tampoco los indicadores de riesgo que podrían aparecer. El hombre también es víctima de todo esto. Encima las perspectivas son cada vez peores. Este mundo ofrece cada vez menos posibilidades pero al mismo tiempo te dice que todo depende de vos. La frustración es terrible.
-¿Se hablará de todo esto el viernes?
-Sí, justamente el primer panel tratará específicamente la cuestión de la “discriminación inversa” o “positiva”. Son las acciones que el derecho internacional impone al Estado realizar en favor de los grupos vulnerables y que implican de algún modo una discriminación de los más favorecidos. La protección frente a la violencia de género se basa en esto. Nuestra misión es proteger a quienes se encuentran en riesgo. Y ese riesgo no es un invento, se basa en datos, en indicadores. Hay un contexto y hay una mentalidad. Por eso se habla de la necesidad de que los hombres y también las mujeres nos deconstruyamos, reconozcamos ese contexto y las razones de nuestras propias conductas. El problema es que los cambios se han dado muy rápido, hay que reconocerlo. A veces el reproche no se entiende. Por eso, en lo personal, dedico mucho tiempo a hacer audiencias con los denunciados. Quiero aclarar que estoy simplificando un tema sumamente complejo.
-¿El segundo panel?
-El segundo panel estará dedicado a la identidad de género, que es la vivencia interna, personal, del género, como cada cual lo percibe o siente. Implica el reconocimiento de la dignidad humana, de la autonomía personal, del libre desarrollo de la personalidad, es decir, de la libertad en el mejor de los sentidos porque no puede imponerse a nadie un género que no se corresponde con su vivencia personal. Y por supuesto que eso implica reconocer el derecho de las personas a que su género sea nombrado del modo más adecuado a esa vivencia.
El programa
1° Panel: “Violencias hacia las mujeres y Derechos Humanos. Algunos aspectos de discriminación inversa”
- Rodolfo Jáuregui. Juez de Familia y Penal de NNA N° 2 de Concordia. Docente universitario. Autor de libros y artículos jurídicos.
- Bernardita Zalisñak. Abogada. Docente UADER. Investigadora. Militante de DDHH y Humanismo.
Moderador: Pablo Guercovich, Juez de Familia y Penal de NNA de Gualeguay
2° Panel: “Identidad de Género: aspectos jurídicos, psicológicos y socioculturales”
- Celina Ansaldi, Jueza de Familia y Penal de NNA de C. del U., Mediadora
- Johanna Guercovich. Psicóloga. Especialista en Psicología Clínica. Docente UBA. Equipo de Salud Mental del Hospital Municipal de Vicente López.
- Valeria Soledad Martínez Calvo. Capacitadora del Inadi-Entre Ríos.
- París Caraballo. Militante LGBTIQ. Obtuvo uno de los primeros DNI no binarios
Moderadora: Rosa Fernández Campasso. Jueza Civil y Comercial Nro. 2 de Gualeguay