Razón crítica
La importancia de la ciencia y la tecnología
En el contexto y las dinámicas que propone el mundo actual, los países están cada vez más impulsados a invertir en ciencia y tecnología.
Los parámetros de desarrollo para lograr el bienestar de sus respectivas poblaciones, invita a los diversos Estados a generar cada vez a menudo un entorno favorable para el desarrollo de las ciencias y las tecnologías. Actualmente, sin un ambiente de inversiones para las mismas, el progreso de un país se torna inviable.
Argentina invierte un 0,31% de su producto bruto interno (PBI) en ciencia; estando este presupuesto repartido en diferentes organismos del estado como, por ejemplo, CONICET, INTA, INA, CONAE, y universidades públicas. Si nos comparamos con otros países de la región, según datos del Banco Mundial (2019), Brasil invierte 1,21%, Chile 0,34% y Uruguay 0,48% de su PBI en ciencia. Otros países desarrollados, muestran una inversión que se triplica en relación con los mencionados países sudamericanos. Tal es el caso de Estados Unidos que invierte 3,45% de su PBI, Japón 3,26%, Bélgica 3,48%, Alemania 3,14%, en tanto que Israel y Corea del Sur invierten el 4,9%. (Fuente: https://santafe.conicet.gov.ar/el-rol-de-la-ciencia-y-la-tecnologia-en-el-desarrollo-de-un-pais-soberano/). Como se puede observar a partir de estos números, el desarrollo de los Estados mantiene una relación directa con su inversión en ciencias y tecnología. A mayor iniciativa inversora en atas áreas, más es el desarrollo por país. Esto no es casualidad, claro está.
Una sociedad con bajo nivel de desarrollo científico-tecnológico se encuentra ligada a una economía dependiente de otras economías productoras de bienes con valor agregado. Esta situación genera falta de inclusión, desigualdad social y la extracción de riqueza desde los países más pobres hacia los más ricos. El conocimiento científico se traduce en un incremento de la calidad de vida de las personas a través de políticas de gestión de recursos y desarrollos tecnológicos que nos posicionan favorablemente en un contexto global, que ya en sí mismo, es delicado. Es por esto, que el desarrollo científico-tecnológico aparece como una herramienta indispensable para dirigir decisiones de gestión apropiadas que se traduzcan en políticas públicas que favorezcan al pueblo argentino. Ejercer conscientemente nuestros derechos y obligaciones civiles, expresando nuestra voluntad hacia posiciones que promuevan la construcción de un país soberano es una obligación moral de todos nosotros (Fuente: https://santafe.conicet.gov.ar/el-rol-de-la-ciencia-y-la-tecnologia-en-el-desarrollo-de-un-pais-soberano/).
No caben dudas que la importancia de la inversión en ciencia y tecnología excede a cualquier ideología o partidismo. Dicha tarea está estrictamente ligada al desarrollo del país sin miramientos partidarios.