Puerto Ruíz
El legado de los saladeros en Entre Ríos: Puerto Ruíz, epicentro de la exportación
Durante el auge de la industria saladeril en el siglo XIX y principios del XX, Puerto Ruíz, en las márgenes del río Gualeguay, se posicionó como un centro estratégico para la exportación de productos cárnicos y sus derivados. Este puerto, situado en Entre Ríos, llegó a ser uno de los más importantes del país, destacándose por la producción de tasajo, cueros, grasas y conservas, que se enviaban ultramar a través de su dinámica actividad portuaria.
Una industria a la vanguardia
Los saladeros, al ubicarse estratégicamente cerca de puertos como el Riachuelo, Ensenada, Berisso y Puerto Ruiz, aprovecharon las vías fluviales para exportar su producción. En Puerto Ruíz, el saladero San José fue un ejemplo de innovación industrial en su época. Esta fábrica, que operaba con tecnología de vapor, contaba con una planta de conservas para exportar extracto de carne enlatada al vacío.
El saladero San José tuvo su época de mayor esplendor hasta 1905, funcionando como un establecimiento zafrero que procesaba novillos provenientes del Litoral Sur durante el verano. Aunque reanudó sus operaciones en dos o tres temporadas posteriores, cesó definitivamente alrededor de 1920. Sus edificios, que se mantuvieron hasta los años 70, hoy son solo un recuerdo histórico representado por la chimenea que aún se erige como símbolo de ese pasado industrial.
Puerto Ruíz: puerto clave en la exportación argentina
Gracias a la actividad de los saladeros, Puerto Ruíz se consolidó como uno de los principales puertos de exportación del país. Por varios años, allí operó la segunda aduana en importancia de Argentina, lo que refleja el impacto económico y logístico que tuvo esta región en el comercio internacional.
La llegada de la tecnología de refrigeración
A principios del siglo XX, cuando parecía que la industria basada en el ganado vacuno estaba en declive, surgieron esperanzas con los avances en tecnologías de conservación de carne. La llegada del buque francés "Le Frigorifique", equipado con cámaras de aire seco a 0°C enfriadas por vaporización de éteres, marcó el inicio de una nueva era.
En 1876, este buque llegó a Buenos Aires con carne fresca conservada durante tres meses. Aunque el sabor inicial de la carne no era ampliamente elogiado, el evento generó entusiasmo, destacando el potencial de la refrigeración como una solución revolucionaria para la exportación de productos cárnicos. Este avance sentó las bases para lo que más tarde se convertiría en la industria frigorífica moderna.
Un legado que perdura
Aunque los saladeros, como el San José, han desaparecido, su impacto en la economía y el desarrollo de Puerto Ruiz permanece en la memoria colectiva. Esta región no solo fue testigo del auge de la industria saladeril, sino también de los avances tecnológicos que transformaron para siempre la manera en que Argentina exportaba su riqueza ganadera al mundo.
Hoy, Puerto Ruiz sigue siendo un testimonio vivo de la historia industrial del país, un lugar donde el pasado y la innovación dejaron huellas imborrables en el paisaje entrerriano.
Fuente de info: Puerto Ruiz Saladero "San Jose" Hnos Berisso