Rubén Bonggio cuenta su experiencia como asador

¿Cuánto tiempo hace que se dedica a la profesión?

Rubén Bonggio: Hago este oficio desde hace alrededor de 32 ó 33 años. Y siempre me dedico a asar vaquilla con cuero asado en los eventos en los que somos requeridos. 

Siendo chicos, en la casa de mis viejos, siempre comíamos asados, parrilladas y siempre me gustó el fuego y luego me dediqué a esta actividad. Poco a poco empezamos a hacer algunos y después con el tiempo fuimos haciendo por cantidad.

¿Cuánto tiempo demanda asar la carne?

Rubén Bonggio: Eso depende del animal. En Médanos, en el último festival del búfalo a la estaca, asamos veintiún animales a la parrilla. El búfalo es espectacular. En esa ocasión, hubo cuarenta media res, que se van asando en un espacio de 22 metros de parrilla de cada lado, con el fuego en el medio.

También depende de la calidad de carne; el animal puede ser de 7 puntos, 8 puntos, 10 puntos y todo es diferente como así también lo es el trabajo. Un animal chico tal vez demande 4 horas y media para asarse; uno de 220 o 250 kilos, 5 horas; uno de 300 kilos, 6. 

Y en cuanto a los búfalos, en el festival de Médanos, comenzamos a las 9 de la noche para culminar al otro día, a las 10 de la mañana. Demanda lleva mucho más tiempo porque es mucha cantidad de animales para asar.

Se pueden asar diferentes variedades de animales, tales como lechón, chivo, cordero, vaquilla.

¿Cuántos integrantes componen el equipo de trabajo?

Rubén Bonggio: El equipo de trabajo está compuesto por tres hijos míos y cuando el evento es grande busco más gente. Por ejemplo, a Médanos vamos 13 o 14 asadores. Ahí vamos contratados para cocinar para la venta, no para competir. 

¿Hay muchos asadores en Gualeguay?

Rubén Bonggio: Sí, hay varios. Les enseñé el oficio a algunos de ellos, que a su vez han emprendido por su cuenta y otros trabajan conmigo.

¿Se puede vivir de este oficio?

Rubén Bonggio: Y eso depende. Hace algunos años atrás, sí, porque se trabajaba mucho más. Ahora por el costo de los animales, ya cambió mucho. Ahora no es tan fácil asar una vaquilla, que cuesta 150.000 o 180.000 pesos. No es lo mismo. Antes se podía vivir de este oficio porque la carne era barata; ahora un kilo de asado con cuero cuesta 3.000 pesos. Pero sin dudas que igualmente significa un ingreso de importante de dinero por la tarea. 

¿A quiénes les gustaría saludar o agradecer?

Rubén Bonggio: saludo al Club Pelota, a “La Simona”, entre otros, que nos convocan permanentemente para trabajar, para asar alguna vaquilla con cuero o asado en eventos. Un saludo especial a la gente del Club Pelota, donde soy muy conocido y me aprecian muchísimo.