dormir con el gato en la cama es bueno?
¿Cuáles son los aspectos positivos de dormir con un gato? neutralizan la energía negativa y quieren lo mejor para sus compañeros humanos
Entre los amantes de los gatos, es habitual dejar que nuestros mininos duerman en la cama. Sin embargo, existen opiniones contradictorias acerca de que dormir con los gatos y compartan el lecho con las personas.
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En este artículo queremos exponerte los pros y los contras para que reflexiones con qué punto de vista simpatizas más y elijas el modo de actuar con tu pequeño tigre.
¿Cuáles son los aspectos positivos de dormir con un gato?
Los admiradores de los mininos, como nosotros, sabemos que dormir con el gato tiene muchos lados bonitos:
Fortalece el vínculo entre nuestros amigos felinos y nosotros, aparte de que el ronroneo y la cercanía tienen un efecto relajante en nuestro sistema nervioso. De ahí que se diga que los solteros que comparten hogar con un gato están mucho más relajados que los que no lo hacen. Los que están a favor de dejar que sus compañeros felinos duerman en la cama defienden que los mininos fomentan la paz interior y la calma en las personas. El hecho de que el gato se duerma sobre la manta de la cama por la tarde o que salte a la cama por la mañana para saludarnos —o para recordarnos dónde está su comedero— influencia positivamente nuestro estado de salud general. Los ronroneos, sobre todo, tienen un efecto curativo en las personas, y la tranquilidad se transmite del minino a los humanos. En este contexto, es importante señalar que no es tarea del felino compensar un déficit de su compañero humano, sino que se trata del bienestar de ambos por igual. Los dos son iguales en cuanto a sus necesidades. La situación ideal es aquella en la que tanto al gato como al dueño les gusta echarse la siesta a la vez.
Los gatos neutralizan la energía negativa y quieren lo mejor para sus compañeros humanos
Además, la teoría afirma que los gatos tienden a centrarse en las zonas de interferencia en los hogares o en el punto más débil de las personas. En un caso particular se describe a un minino tumbado en la cabeza o en la cara de su compañero humano por la mañana. Según esta teoría, esto sería poco halagador para la persona en sí. Desde un punto de vista esotérico, se proclama que los gatos disminuyen y neutralizan la llamada «energía negativa» de sus compañeros humanos. Esto no afecta al minino, por lo que se podría decir que casi tiene un efecto positivo en la energía de un hogar. Además, muchos gatos proveen un tipo de cuidado a su querida familia humana (al igual que se dice sobre los perros) y muestran un interés notable en su bienestar. Por supuesto, esto tiene un efecto positivo para las personas que se encuentran al lado del felino si notan que este percibe sus estados de ánimo y que está allí para ellos, al igual que ellos lo están para su minino.¿Cómo compaginar el hygge y la higiene?
El término danés hygge está muy de moda últimamente. Se utiliza para describir una sensación de bienestar que sienten las personas al estar en un lugar acogedor y realizar una actividad que sea de su agrado. Ahora bien, ¿cómo podemos combinar esto con la higiene? No nos olvidemos de que los gatos pueden infestarse con parásitos y transmitírnoslos a nosotros. Para evitarlo, suele ser suficiente con vacunar y desparasitar a nuestros mininos con frecuencia. Sin embargo, los gatos que salen de casa, bajo ciertas circunstancias, pueden introducir parásitos de otros felinos en nuestra cama. De esta manera, con un contacto demasiado cercano, los parásitos del animal pueden pasar a los humanos.
En libros especializados de odontología, incluso se describen algunos casos aislados en los que la resorción dentaria puede afectar más a los dueños de gatos que a la media. No obstante, estos hallazgos no han sido confirmados de forma definitiva.
Una cama para gatos es una buena solución
En la selección casi infinita de cómodas camas para gatos seguro que encontrarás una en la que a tu minino le guste pasar las noches —y, seguramente, también gran parte del día
Si acostumbras al gato desde el principio a no dormir en tu cama, este lo aceptará sin problemas. Sin embargo, si tomas esta decisión con el paso del tiempo, puede que el felino no sepa cumplir esta regla modificada. Por ello, si fuera posible, deberías aplicarla desde el comienzo y equipar a tu gato con una confortable camita adaptada a sus necesidades.
Una cama para gatos aporta sensación de seguridad y de protección al minino durante el día y la noche y, además, lo protege de las corrientes de aire. Un lugar para descansar es indiscutiblemente importante para el bienestar de tu compañero felino.
Desacostumbrar al minino en algún momento del futuro puede resultar un verdadero estrés tanto para él como para ti. Esto no quiere decir que con un refuerzo positivo, como puede ser el uso de un clicker de adiestramiento o unos snacks para gatos, no se pueda conseguir.
¿Qué debo tener en cuenta a la hora de dejar que mi gato duerma en la cama?
Es igual de importante la desparasitación trimestral como asegurarse de que nuestro minino no tiene ectoparásitos y pulgas. Esto es relevante porque, en el peor de los casos, pueden transmitir la enfermedad de Lyme a las personas. Debemos tener en cuenta que, aparte de los parásitos, también se pueden transmitir enfermedades bacterianas. Por lo tanto, los aspectos positivos que hemos visto sobre la cercanía del gato se pueden convertir en puntos negativos.
Si dejas que tu pequeño felino duerma contigo en la cama, deberás tomar más medidas de higiene que si este no la utilizara, ya que los mininos sueltan mucho pelo de forma natural.
También hay que prestar una atención especial si somos alérgicos o asmáticos. En este caso, deberías renunciar lo máximo posible a la compañía de tu gato en la cama.
Por otra parte, al minino no se le ha perdido nada en la cama de tus hijos. Montando una rejilla protectora, puedes evitar que el gato salte a la cama de tus hijos por la noche. Por lo demás, durante el día los más peques de la casa pueden pasar tanto tiempo jugando y acariciando al gato como quieran —y como quiera el felino—. Por supuesto, para ello también es necesario tomar ciertas medidas higiénicas.
Teniendo en cuenta todos estos aspectos, está en tus manos decidir si dejas que tu gato duerma en la cama o no.